Si las elecciones generales españolas se celebraran hoy, el partido Podemos, liderado por el cientista político y eurodiputado Pablo Iglesias, sería el más votado. Sólo diez meses le ha llevado a la formación política darle la vuelta al tradicional tablero bipartidista español y dejar atrás en intención de voto al partido en el gobierno, Partido Popular, y al de oposición Partido Socialista Obrero Español.
Los datos del sondeo Metroscopia, elaborado para el diario El País, sitúan al grupo de izquierda Podemos con un 27,7% de los sufragios, 1,5 puntos por encima del PSOE (26,2%), y a siete puntos del PP (20,7%) que se desploma desde el 30,2% de septiembre, logrando un hito histórico en intención de voto para una nueva formación política y duplica la intención de voto respecto al mes anterior (13,8%).
Aunque este sondeo se adelanta a los datos oficiales del Estado, entregados a través del barómetro mensual del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), los analistas ya buscan explicaciones a este resultado en los casos de corrupción que implican a empresarios y políticos de varios partidos a nivel nacional.
"Los ciudadanos están reaccionando a la situación política actual más que pensando en el próximo gobierno. Hay elevada volatilidad en los sondeos. Pero Podemos está ahora mucho más consolidado como partido viable", explicó el analista político del CSIC, José Fernández-Albertos, a Financial Times.
"La corrupción les ha ayudado mucho, pero la gente siempre ha vivido con corrupción. La clave está en que los españoles sienten que el sistema no responde a las demandas sociales", agregó el experto.
Dos frentes abiertos
Aunque queda más de un año para las elecciones generales, los resultados de Metroscopia complican un poco más el panorama para el gobierno de Mariano Rajoy a una semana de la votación sobre la independencia de Cataluña. El 9 de noviembre, el gobierno regional de Artur Mas realizará una votación voluntaria para que los ciudadanos expresen si están a favor o no de la independencia de la región.
En opinión del economista de BNP Paribas, Víctor Echevarría, el ascenso de Podemos y de la "línea dura nacionalista" en Cataluña podría derivar en un "parlamento fragmentado" tras las próximas elecciones generales, lo que complicaría la formación del nuevo gobierno. "A futuro, la clave está en los próximos movimientos del gobierno catalán tras la cancelación del referéndum original y de la versión modificada que también fue declarada ilegal", indicó a Bloomberg.
El alza de podemos
En enero, a través de un manifiesto, se anunció la formación de un movimiento popular que aunaría a los diversos grupos de lucha social surgidos en España desde 2011, conocidos como "indignados", con el primer objetivo de presentarse a las elecciones europeas de mayo y donde logró ser la cuarta fuerza más votada (7,98%). Tras cumplir este hito, el partido se enfocó en las próximas elecciones generales (para finales de 2015), con un programa que defiende, entre otras medidas, la inversión pública para generar empleo, la reducción de la jornada laboral semanal y rebajar la edad de jubilación a 60 años para redistribuir las oportunidades laborales.