La empresa matriz de la aerolínea
United Airlines, UAL, anunció hoy que perdió US$537 millones en el primer trimestre de 2008 debido en gran parte al alza del
precio del combustible, y que, además de reducir sus vuelos,
eliminará este año 1.000 puestos de trabajo.
Sus pérdidas en los tres primeros meses del año se multiplicaron
por 3,5 con respecto al primer trimestre de 2007, en el que tuvo
pérdidas de US$152 millones.
El retroceso por acción fue de US$4,45 en el primer
trimestre frente al 1,32% de pérdida por título del mismo
período del año anterior.
Los resultados de United, que salió de la bancarrota hace dos
años, fueron peores de lo esperado por Wall Street, pues los
analistas habían calculado una pérdida por acción de US$3,41.
Los ingresos operativos de United Airlines subieron un 7,7% al pasar de US$4.373 millones en el primer trimestre
de 2007 a US$4.711 millones en los tres primeros meses de
2008.
La segunda aerolínea de Estados Unidos y cuarta del mundo por
pasajeros transportados pagó US$1.575 millones en
combustible de aviación este trimestre, un 51,3% más que
en el primer trimestre de 2007 en el que pagó US$1.041 millones, según se desprende de las tablas de resultados difundidas
hoy por la compañía.
Para afrontar el alza de los precios del combustible de aviación,
United Airlines anunció que tomará "medidas agresivas" para reducir
sus gastos.
La aerolínea estadounidense eliminará 30 aviones de su flota, los
más viejos y los menos eficientes desde el punto de vista del
consumo de combustible.
También anunció que hasta final de año despedirá a 1.000
trabajadores, lo que supone un recorte de aproximadamente un 1,8% de su plantilla de 55.000 empleados.
Las acciones de United Airlines bajaban en la media sesión en la
Bolsa de Nueva York US$7,33 (34,2%) hasta los UUS$14,10.