Operadoras europeas vs Google: la batalla por el control de Internet
Las grandes operadoras europeas reclaman el apoyo de Bruselas para competir con los gigantes estadounidenses de Internet y liderar la era digital.
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En el negocio de las comunicaciones, la cuestión, cada vez más, es el tamaño. Las grandes operadoras europeas buscan fórmulas para no perder terreno frente a los nuevos gigantes tecnológicos estadounidenses como Google y Facebook que están tomando el relevo en la era de Internet.
Debilitadas por los rigores de la recesión, firmas como Deutsche Telekom y France Télécom, pero también Telefónica y Vodafone, necesitan desesperadamente ganar tamaño, flexibilidad y libertad de acción para competir con los nuevos dominadores estadounidenses Convertido en portavoz de facto de las operadoras, el presidente de Telefónica, César Alierta, lanzó esta semana una inusualmente cruda petición de apoyo a la Comisión Europea para relajar las exigencias regulatorias a las que están sometidas las compañías europeas y elevar las exigencias a las tecnológicas estadounidenses, para facilitar así la creación de un sector potente en Europa a través de fusiones y acuerdos.
En Europa hay más de 1.200 operadoras de telecomunicaciones fijas, un centenar de operadores de móvil con red y más de 200 operadores virtuales. En EEUU hay apenas seis operadores de ámbito nacional.
El campo de juego de Internet es, por definición, global. A medida que los servicios basados en los recursos de las operadoras y la fortaleza de sus infraestructuras (voz y SMS) pierden terreno como elementos diferenciadores, frente a las propuestas ‘over the top’ (aplicaciones para el móvil y contenidos audiovisuales), los gigantes de Internet imponen su ley ante las telecos, convertidas en evoluciones sofisticadas de ‘carriers’ que no terminan de encontrar su sitio en el ámbito digital.
Alierta lamentó que no exista una “regulación” simétrica en toda la cadena de valor en la economía digital. “Solo ocurre con las empresas de telecomunicaciones. En el resto de la cadena de valor no hay regulación y están encantados”, dijo el ejecutivo en referencia al dominio de empresas como Google, Apple y Facebook.
Alierta señaló que “en la Comisión están obsesionados porque no tengamos más del 40% de cualquier mercado”, mientras que “las aplicaciones”, fundamentales en la cadena de valor, “van a los sistemas operativos cerrados, que son dos monopolios”, en referencia a Google y Apple.
“Las operadores invertimos 50.000 millones de euros en redes el año pasado, pagamos 6.000 millones en espectro radioeléctrico, damos empleo a un millón de trabajadores y pagamos miles de millones de euros en impuestos. Mientras, el resto de la cadena de valor, es decir, principalmente las compañías de Internet, invirtieron 40 millones, apenas crean emplean y no pagan impuestos”, dijo Alierta.
El CEO de Vodafone, Vittorio Colao, respaldó a Alierta: “no es justo que Facebook o Whatsapp con más 1.000 millones de clientes, no tengan que seguir las mismas reglas que nosotros”.
Contraargumento
Frente a esta posición, las empresas de Internet sostienen que son precisamente las “app” y los servicios que crean empresas como Google (Youtube), Amazon o Facebook las que multiplican el tráfico generado en la red, por el que los operadoras cobran a sus clientes, de tal modo que el negocio sería muy inferior sin su existencia. Defienden, además, que esta es su gran contribución principal al sistema, por lo que desmienten las tesis de las operadores, que aseguran que estas firmas ni invierten ni contribuyen al sostenimiento de las grandes infraestructuras.
La estructura global de las empresas de Internet, y la extremada flexibilidad que les otorga la práctica ausencia de elementos físicos, como redes o grandes equipos, permiten a estas compañías competir en cualquier lugar sin estar sometidas a las reglas de competencia que se impone a las telecos en sus rivales. Aunque Google controle el 90% del mercado mundial de publicidad online o Amazon venda casi todos los ebooks del planeta, están al margen de los rígidos controles antimopolio al que está sometida la industria de las telecomunicaciones.
Lo cierto es que el aumento del peso de los servicios que proporcionan empresas tecnológicas está desplazando la balanza del negocio mundial de las comunicaciones a EEUU, donde gigantes como Google, Facebook y Amazon, exhiben la potencia de disparo de sus propuestas de éxito. Mínima inversión–máxima visibilidad: la ecuación perfecta en Internet. La gran batalla de la era digital está servida.