Antonio Büchi: "Debe haber reglas estables que permitan invertir con tranquilidad"

Si hay un sector que ha vivido una verdadera revolución en estos últimos 30 años, es el de las telecomunicaciones.

Un protagonista privilegiado de gran parte de esta historia ha sido Antonio Büchi, quien lleva casi dos décadas en Entel y casi siete años ocupando el máximo cargo gerencial de la compañía controlada por las familias Hurtado Vicuña y Matte.

Es precisamente con el heredero de la dinastía Büchi con quien repasamos los hitos que han marcado un antes y un después en la industria, así como los desafíos que plantea el desarrollo del 5G en esta carrera por mantener a Chile a la vanguardia de las telecomunicaciones en la región.

Las transformaciones gatilladas por este sector no han sido triviales y Büchi lo sabe. "Uno siente orgullo y cariño por lo hecho, sobre todo por los cambios que este sector ha generado en la sociedad y en la vida de las personas", enfatiza.

Y es que al cabo de las últimas tres décadas, los chilenos pasaron de pedir hora e inscribirse en una lista para conseguir un teléfono fijo (para que llegara dos años después) a tener hoy más teléfonos que habitantes, con millones de personas conectándose a cada segundo a internet. "Eso ha sido una tremenda transformación", cuenta.

- A su juicio, ¿cuáles han sido los mayores cambios de paradigma en el sector en las últimas tres décadas?

- Si uno mira hace 30 años, había dos operadores estatales, uno concentrado en el mercado hogar y el otro en la larga distancia y que le daban lo que podían a los clientes... Hoy hay un mercado profundo, especialmente en el móvil, con competencia. Un sector privado pujante, que invierte. Hay innovación, tecnología de punta, donde lo central es que el cliente es el rey. Otro tema relevante es que antes uno hablaba de comunicación y de telecomunicación, hoy uno habla de cómo las personas hacen su vida conectada de manera digital.

- ¿Y en particular, en la organización cómo han vivido estos cambios?

- Los hemos vivido con mucha intensidad... Esta era una empresa que partió centrada en la larga distancia, el 80% de nuestros ingresos venían de ahí. Servicio que hoy en el mercado es menos del 1%. Luego vino la comunicación móvil de voz, de donde provienen nuestros mayores ingresos.

Entonces, hemos debido transformarnos con el tiempo, invirtiendo, readecuando procesos y maneras de interactuar, movilizando a los ejecutivos y trabajadores para que sean capaces de ir viviendo estos cambios. Todo esto dentro de un ambiente de competencia y de alta inversión.

- Pero también ha tenido costos...

- La transformación no ha sido gratis. Ha sido fundamental liberar las energías de un sector privado pujante, que quiere invertir, y que apuesta por el desarrollo tecnológico para mejorar la vida de las personas. Ese fue un factor esencial de la transformación de la industria en los últimos 30 años.

La Ley de Telecomunicaciones

- Y en el tema regulatorio, ¿cuáles han sido las claves en el despegue de las telecomunicaciones?

- Yo diría que el primer gran hito fue la Ley de Telecomunicaciones, que dio un marco de acción para que se desarrolle el sector privado, que se perfeccionó hacia finales de los '80.

Entonces, hay una piedra angular que establece un marco de acción donde se dice que las empresas van a tener un rol relevante, que las concesiones van a ser estables, hay libertad tarifaria... hay mercado. Es cierto que se identifica mucho con el multicarrier, porque es de los primeros nuevos cambios que gatillan eso, pero eso se desregula más adelante ¿y cuál es la clave? Se mete más posibilidades de competencia

- ¿Y las licitaciones de espectro?

- Ese fue otro hito importante, cuando se abre el mercado nuevamente y se desarrolla el móvil. Luego apareció el calling party pays que hizo que el mercado de prepago explotara, y se masificaran las comunicaciones... Esta es una industria con mucho cambio tecnológico, en la cual para que de verdad exista un desarrollo, tiene que haber reglas estables que permitan con tranquilidad invertir, desarrollar tecnologías, equivocarse.

- En ese ensayo y error, ustedes también han tenido fracasos...

- Por supuesto. Eso es clave en el proceso de innovación, y el tener reglas estables que den a entender que el que invierte bien gana los beneficios y al que le va mal corre los riesgos empresariales. Nosotros, por ejemplo, con el Will fue un proceso de inversión en el que la tecnología no se desarrolló por ahí en ese momento...

- A su juicio, ¿cuáles son las claves de ese marco regulatorio estable?

- Libre iniciativa, libre emprendimiento, neutralidad tecnológica en las licitaciones de espectro, certeza jurídica y, ante los cambios, mucho diálogo.

- En medio de la discusión para el desarrollo de 5G, ¿están esas condiciones?

- Nosotros esperamos que se mantenga la política de construcción conjunta de diálogo, que ha mostrado ser efectiva. Chile ha hecho cambios que otros países no han hecho y se hicieron antes gracias a la estabilidad jurídica y a la capacidad de diálogo.

- ¿Se ha visto coartado ese diálogo en el último tiempo tras el congelamiento de espectro?

- Confiamos en que el diálogo va a seguir y que va ha haber las instancias para mantenerlo.

- ¿Por dónde debiesen venir los incentivos para el despegue del 5G?

- Aquí hay que partir de la base de que, si bien es importante lo que hacen las autoridades, lo más relevante es lo que moviliza a este sector privado que son los cambios tecnológicos.

Aquí en Chile tuvimos 3G al mismo tiempo que se estaban licitando sus bandas. ¿Por qué? Por la existencia de un marco estable, con concesiones estables y con neutralidad tecnológica que permitía que sobre los espectros anteriores se desarrollara la tecnología 3G.

Lo mismo pasó con el 4G. WOM estaba desarrollando 4G cuando se licitaban las licencias. Si bien es importante lo que haga el regulador, lo más importante es lo que se haga de manera conjunta.

"Hay cosas que no nos parecen"

- ¿Cómo miran ustedes la consulta sobre los límites de espectro que están en el Tribunal de Libre Competencia?

- Nosotros estamos mirándola con atención, hay cosas que no nos parecen y que proponen cambios no tan deseables.

- ¿Cómo cuáles?

- Cambios en el rol de la Subtel, en la institucionalidad de las concesiones...

- ¿Te parece que el TDLC fije la política de espectro?

- Eso no es nuevo, pero el fijar un techo no nos parece. Se hace muy poco como política general, cuando lo haces al final fijas cantidad de operadores que crees que va a haber. A nuestro juicio es más oportuno analizar en cada ocasión qué es más conveniente para cada licitación. Es lo que se venía haciendo.

- ¿Cuál es el peligro de que se fijen límites de espectro? ¿Por qué no les gusta?

- Porque el uso de espectro es algo súper dinámico. Tiene que ver con los modelos de negocios, con el cambio tecnológico. Entonces, cuando tú fijas cosas pueden quedar distribuidas de manera arbitraria, lo único que vas a hacer es ponerle trabas al desarrollo.

- ¿Se habla en la industria de la desregulación total? ¿Es un camino viable?

- Este es un sector que por la importancia que tiene en la vida diaria de las personas probablemente siempre va a estar sujeto a regulaciones. Ahora, qué aspectos debieran ser inspiradores de la regulación... normas claras, incentivos a la innovación, derechos de propiedad bien definidos, competencia. Eso moviliza al mercado. También, el rol del Estado como un facilitador y un promotor de este desarrollo de inversiones.

- ¿Qué espera Entel de este proceso de discusión sobre el 5G? ¿Estamos atrasados?

- Ojalá no se desdibuje todo lo que hablamos antes. Espero que el tema de los límites de espectro no genere una traba al desarrollo tecnológico.

- ¿Cree que Chile ha perdido liderazgo en el ámbito de las telecomunicaciones en la región?

- Quizás se han estrechado las distancias. También hay otros que corren.

- ¿Todo lo que está ocurriendo con la discusión por el 5G podría poner en riesgo ese liderazgo?

- Esperemos que salga de buena manera. Nosotros vamos a trabajar para ello, vamos a contribuir en el diálogo.

- Pero ese diálogo tampoco puede durar mucho, considerando la velocidad en el desarrollo de las tecnologías...

- Todos los ciclos se han ido acortando, porque los ciclos de introducción de tecnología en el mundo también se han ido achicando. Lo que sí, hay un llamado de alerta en el sentido de ser ágil, y no querer reinventar la rueda. Se tiene que simplificar el proceso para poder sacar rápidamente la licitación de 5G.

La salud del negocio

- ¿Cuál es el balance de la operación en Perú?

- Estamos felices con lo obtenido. Tenemos siete millones y medio de clientes, una participación de aproximadamente 20% del mercado, y una marca que es querida y valorada por la gente. Todavía nos falta un poco más de desarrollo para acaparar más espacio en zonas de rentabilidad deseada. Pero los objetivos principales los hemos ido cumpliendo.

- ¿Es Perú donde ustedes tienen puestas sus fichas hoy en día?

- Acá en Chile también tenemos oportunidades. Está el fijo inalámbrico, que nos tiene esperanzados y es la tecnología que se está desarrollando. Estamos también creciendo en fibra para los hogares y servicios digitales en empresas. Son cuatro pilares en los que sin duda Perú tiene un rol muy importante.

- ¿El más importante?

- Probablemente lo es. Seguido por la incursión en hogar, que tiene la arista de la fibra y del fijo inalámbrico que creemos que hoy en día está lo suficientemente madura como para albergarla. Puede ser nuestro caballito de batalla para llevar internet a lugares donde hay pocas opciones, ya sea porque son muy caras o de mala calidad. Esto en segmentos C2 o C3.

- ¿Están evaluando otras opciones de crecimiento en otros países de la región?

- Siempre vamos a estar mirando, pero nuestra primera preocupación hoy es desarrollar el mercado hogar en Chile, el negocio digital y nuestra operación en Perú.

"Tenemos un rol en la transformación digital de las empresas"

- Ustedes están haciendo una fuerte apuesta en lo que es la transformación digital, ¿qué significa eso en concreto?
- Tiene una base en cuanto al cambio de sistemas por unos más nuevos, pero sobre eso también hay cambios en la organización. Hoy tenemos una organización ágil, una manera donde la gente de sistemas y de servicios están también en contacto con las personas de comercial... tiene que ver con toda una metodología. Se ocupan sistemas nuevos con el fin de atender mejor a los clientes, donde la atención se digitaliza completamente. Esto también lleva a plantearse el rol que tienen las tiendas de atención. La transformación digital tiene muchas caras y es un proceso profundo y amplio.
- ¿Cuál es el objetivo de todo este cambio?
- Está todo pensado para ser más eficaces y darle al cliente lo que quiere.
- ¿Cómo lo perciben los clientes?
- Lo que pasa es que los clientes no lo van a vivir como transformación digital. Ellos valoran la experiencia, como poder enrolarse en un plan de la compañía sin ir a la tienda, solo sacándose una selfie, o la oportunidad que le damos de que la factura pase a ser medio de pago para Google Play, Spotify, Netflix. Eso cambia la vida de las personas. Hay mucha gente que no tiene una tarjeta de crédito pero sí tiene una opción de pago a través de nosotros.
Donde sí tenemos un rol es en la transformación digital de las grandes empresas. En los otros nosotros somos un habilitador para entregarle la última tecnología.