La petrolera brasileña Petrobras
arrojó un déficit de US$775 millones en su balanza comercial
del primer trimestre de 2008, contra un superávit de US$528 millones en igual período de 2007, informó hoy la empresa.
Según explicó el director de abastecimiento y refino de la
empresa estatal, Paulo Roberto Costa, para todo 2008 se proyecta un
déficit de US$475 millones, en la diferencia entre las
exportaciones y las importaciones.
En todo 2007 la empresa obtuvo un superávit de US$72 millones en sus operaciones comerciales de crudo.
El ejecutivo afirmó durante una rueda de prensa en Río que la
empresa mantiene expectativas de revertir las estimaciones iniciales
"conservadoras" para todo el año, pese al resultado francamente
negativo del primer trimestre.
En lo que queda de 2008 la empresa pondrá en operaciones nuevas
unidades industriales y de producción de crudo que ayudarán a
mejorar su balanza, dijo el director de abastecimiento de la
empresa.
Explicó que el déficit en el primer trimestre estuvo asociado al
crecimiento de la economía brasileña, que provocó un aumento de las
importaciones de crudo y diesel, especialmente para atender el
mercado de maquinarias agrícolas.
También influyó una parada programada en una unidad de la
refinería de Paulinia -interior del estado de Sao Paulo- la más
importante del país, con capacidad total instalada para procesar
365.000 barriles por día (bpd).
Esa parada técnica comprometió el procesamiento de 180.000 bpd,
que hubo que sustituir con más importaciones.
Por otra parte el valor de la gasolina exportada por Brasil fue
menor al de la importada.
Costa explicó que Petrobras ha invertido en los últimos años
US$8.000 millones para adecuar sus unidades de refino para
producir una gasolina de mejor calidad, con menos azufre.
"Eso se debe revertir en mejores valores y mayores volúmenes
exportados en los próximos años", dijo.
En 2006 -un año electoral- Petrobras anunció con bombos y
platillos a través de una campaña de comunicación de largo alcance
que Brasil había alcanzado "la autosuficiencia energética" en
materia petrolera.
Afirmaba que había logrado abastecer de manera sostenida todo el
consumo interno de Brasil -hoy en casi dos millones de barriles por
día- con la producción propia de la empresa.
Pero Petrobras había advertido que mantendría "algunas"
importaciones de crudos más livianos y de mejor calidad para atender
sus refinerías, que no estaban adaptadas al crudo pesado, el que más
abunda en el país.