Mi Jardín Secreto, el negocio de las hierbas

Por Alejandra Clavería



Ciboulette, borraja, paico y toronjil son sólo algunas de las más de 30 variedades de plantas medicinales y ornamentales que la ingeniera agrónoma Alejandra Ayres, comercializa a través de “Mi Jardín Secreto”, la empresa que en 2004 creó junto a su marido, Cristián Altamirano, y que hoy abastece a clientes de todo Chile. 
La compañía, que comenzó con una inversión de $ 30 millones, ha tenido un crecimiento sostenido en los últimos años, gracias al auge que ha experimentado en nuestro país el uso de diversas hierbas no sólo por sus propiedades curativas, sino también por los sabores y aromas que otorgan a la comidas.

“Empezamos a cultivar las plantitas en un invernadero y a vender en pequeñas tiendas. Pero al año nos ampliamos y hoy, mediante una cadena de supermercados, vendemos en todo Chile. Y aunque ha costado que este negocio entre fuerte nuestro país, creemos que ya se ha tomado muy en serio el tema de la hierbas, tanto para cocinar, como para aprovechar sus cualidades curativas”, comenta Ayres.

Pero además del cultivo y la venta de plantas, la empresa ha buscado diversificar su producción y explotar otros nichos. Fue así como comenzaron a vender accesorios para jardín y leña certificada, que hoy ayudan a aumentar considerablemente su facturación anual. “Siempre estamos buscando darle un valor agregado a nuestros productos y ampliar el negocio. Por ello, para este año tenemos como meta seguir consolidando nuestra marca y obtener facturaciones cercanas a los $ 600 millones”, concluye la empresaria.