Empresas y Startups
Beiersdorf: “En el futuro, la industria cosmética tendrá que abordar la genética en sus productos”
Por: Equipo DF
Publicado: Lunes 9 de mayo de 2011 a las 05:00 hrs.
Por Francisca Orellana
Fue en la década del 60, cuando comenzaron a ver los primeros índices de rechazo de productos (por alegia por ejemplo) en la gente, fue el puntapié inicial para que la industria cosmética se volcara de lleno en procesos fuertes de investigación y desarrollo (I+D).
La firma alemana Beiersdorf, que cuenta con las marcas Nivea, Eucerin y Hansaplast, entre otras, fue una de ellas y, a casi 50 años de ese proceso, la innovación e investigación han pasado a estar en su médula a la hora de elaborar nuevos productos. “La gente del ámbito de la piel o de la belleza no espera tanto más, nosotros estamos avanzando más rápido que lo que las mujeres pueden aceptar”, explica Rodoldo Medel, gerente general en Chile de la compañía alemana, que cumple 100 años en el mercado y que en promedio saca entre 80 y 100 patentes por año.
“Hoy todos quieren productos naturales, quieren el ungüento de las abuelas pero con la textura de hoy. Y para eso hay que aplicar tecnología e investigación”, dice el ejecutivo de la firma que en 2010 destinó US$ 218 millones a I+D. En Alemania, cuentan con un laboratorio central y para abordar mercados más específicos crearon tres para Asia, Latinoamérica y Europa.
Medel explica que es una de las pocas industrias que mezcla el desarrollo de tecnología, la química o la ética para parecerse a la piel humana, y dar valor agregado a los productos. De hecho, en 2010 descubrieron una proteína responsable del olor en la sudoración y que se manifiesta de manera distinta en los asiáticos, latinoamericanos y europeos. “Estamos haciendo investigación básica pero para poder hacer algo después con ella. Es un proceso extenso, porque sólo el estudio de ella demoró tres años y aún no hemos hecho nada. Sabemos que el proceso de I+D es cada vez más largo al trabajar con entes biológicos”, afirma. En ese sentido, la genética será el tema en los próximos años. “En el futuro, no más de 10 años, la industria cosmética tendrá que abordar la genética en sus productos o cremas, que con un examen de sangre van a saber la constitución genética de una persona y las firmas se tendrán que adaptar a eso”, dice.
Innovación en Chile
Si bien hoy Beiersdorf Chile aporta en la generación de ideas y propuesta de productos, hace 15 años sí participaban en la creación del prototipo de los mismos. Así nacieron la línea de Bebé y Mamá de Eucerin o el ungüento León de Hansaplast.
“Hoy día, dadas las tecnología que se necesitan, es muy difícil repetir la experiencia, ya que el problema es que las universidades chilenas no tienen la implementación ni están avanzadas para ello. No han entendido que eso puede ser un buen negocio para ellas”, dice.