Arellano
Reforzar el foco en tecnologías e innovaciones importantes para Chile
El economista, consultor y político, José Pablo Arellano -ex presidente ejecutivo de Codelco- sostiene que en los años que le tocó presidir la FCh, estaban en la búsqueda de un nuevo socio privado, que aportara una donación para incrementar el patrimonio y que contribuyera a la alianza público privada de la fundadora ITT Corporation (multinacional de la manufactura) y el gobierno de Chile.
Relata que tras un largo proceso, se incorporó BHP Billiton, que aportó US$ 10 millones. Además, a través de los nuevos estatutos, se sumó a dos consejeros y el Estado de Chile puso otros US$ 10 millones. Esto, explica Arellano, reforzó y priorizó el foco de Fundación Chile en tecnologías e innovaciones importantes para el país, como la minería. Asimismo, en ese período se incorporó el Intec, un instituto tecnológico de Corfo, con el cual aunaron fuerzas.
"Hoy Chile cuenta con un ecosistema de innovación mucho más activo y con más participantes que en el pasado. Esto ha sido fruto del aporte de muchos, entre ellos, Fundación Chile, que ha jugado un rol protagónico, considerando que en el futuro la innovación es indispensable para el aumento de la productividad y el crecimiento en el país", destaca.
Señala que FCh podría seguir creciendo y ser un aporte clave en acuicultura y alimentos agropecuarios, dado que ambas son industrias exportadoras relevantes, asociadas a recursos naturales, donde el país ha ido levantando capacidades humanas, empresariales y de experiencia acumulada.
Óscar Guillermo GarretÓn (2006-2010)
Competencias laborales e impulso a las ERNC
Óscar Guillermo Garretón, economista, empresario y político, señala que durante su período en FCh, la sociedad estuvo marcada por dos grandes temas: competencias laborales y medio ambiente y Energías Renovables No Convencionales.
Respecto del primero, indica que se trabajó en la educación básica y media para la formación de competencias laborales; en este contexto, se creó Innovum, uno de los centros de competencias laborales más grandes en América Latina, y en educación escolar, se concentró en la formación de directivos de escuelas.
En medio ambiente y energías renovables, impulsó la creación de empresas de servicios para instalación y manutención de fuentes de energía solar.
Garretón plantea que los desafíos de aquellos años siguen vigentes, por un lado hay un sistema público pro innovación y emprendimiento, pero de escasa evergadura práctica, por distintas razones: "Baja disponibilidad de recursos, trámites burocráticos, falta de mayor convicción en unos -por mirar con distancia los temas empresariales a los que se asocia la innovación y emprendimiento-, o en otros, por creer que este es un aspecto netamente privado, donde el Estado tiene poco que hacer", explica.
El objetivo a futuro, dice, debe ser lograr una mayor consciencia público-privada de que "la innovación y el emprendimiento dejó de ser asunto de algunos iluminados para ser una tarea de todos".
Álvaro Fischer (2010-2014)
Transformarse en un articulador del ecosistema de emprendimiento
Según Álvaro Fischer, empresario e ingeniero matemático, el país vivió una transición entre 2010 y 2014. Pasó de la creación de un ecosistema de emprendimiento -donde la institución hacía de investigador, emprendedor y hasta inversionista de riesgo- a la generación de estas capacidades en manos de distintas organizaciones, empresas y personas.
"En ese minuto, intentamos transformarnos en un articulador de ese ecosistema para que se conectara de mejor manera, aprovechando de que éramos una institución público privada y por lo tanto, teníamos el atractivo del esfuerzo público por hacer las cosas y el dinamismo del sector privado para lograr que, bajo un mismo paraguas, actores que a veces no se conocían o se sentían competidores, pudieran hacerlo de manera colaborativa", explica.
Comenta que uno de los mayores logros de esos años fue identificar a la energía solar como un aspecto relevante para el país y colaborar en atraer a los actores más importantes del mundo a que lo desarrollaran.
Sin embargo, sostiene que "el principal desafío del país sigue siendo aumentar el flujo de proyectos innovadores, de manera que el capital de riesgo crezca para hacerse cargo de ese mayor caudal de proyectos, y eso incremente la probabilidad de que iniciativas chilenas alcancen la categoría de "unicornios" y sirvan de estímulo al resto de los emprendedores, porque entonces habremos logrado generar un círculo virtuoso", puntualiza.