Corfo logra seguir en pelea por propiedad del terreno más caro de Chile
Corte de Apelaciones permitió a la estatal presentar un recurso para intentar revertir fallo de primera instancia que dio la razón a familia Goycoolea.
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La Corfo sigue en la disputa por quién es el propietario del que es considerado el terreno más caro de Chile, un paño de 4 hectáreas ubicado en Avenida Andrés Bello, al costado de la Rotonda Pérez Zujovic en Las Condes, cuyo valor se estima en más de US$ 130 millones.
Si bien la estatal perdió un juicio en primera instancia frente a la familia Goycoolea, la Corfo recurrió a la Corte de Apelaciones de Santiago para intentar revertir el fallo. No obstante, el clan acusó que la reclamación no fue ingresada por escrito conforme a la ley y que no existe certeza sobre la fecha de la "supuesta" presentación, por lo que solicitó que no sea acogida.
Tras casi ocho meses, la semana pasada, el tribunal de alzada rechazó la postura de los Goycoolea, con lo cual se acogió el recurso de reclamación de Corfo. Al interior de la estatal había temor pues estaba el riesgo de que se dejara a firme el fallo de primera instancia.
Sin embargo, ahora una de las salas de la Corte de Apelaciones de Santiago verá el fondo del asunto y la estatal podrá presentar sus argumentos para intentar revertir el fallo dictado por el 9º Juzgado Civil de Santiago en enero de este año.
En 2012, la estatal –en ese entonces liderada por Hernán Cheyre- presentó una demanda contra los Goycoolea (específicamente contra Inversiones Lo Castillo y otros), con la intención de hacerse plenamente del terreno aledaño a la rotonda. La familia sostiene que un retazo del paño -de entre 10 mil a 14 mil m2- es de su propiedad.
Tras más de cinco años de litigio, con una demora de más de dos años en el proceso de notificación, el 9º Juzgado Civil de Santiago rechazó la petición de Corfo a principios de este año.
Precio récord
El litigio entre los Goycoolea y la Corfo es de larga data. La familia fue propietaria del fundo conocido como Lo Castillo, una propiedad que abarcaba todo lo que hoy es la comuna de Vitacura.
A finales del siglo 19, se les expropió lo que es el Parque Bicentenario para el desarrollo del sistema de agua potable. Según conocedores, aquí se origina el conflicto. Los Goycoolea sostienen que la expropiación partió desde el parque al oriente, por lo que quedaron varios retazos de su propiedad. Por uno de ellos –en donde funcionó el aparcadero municipal- el clan recibió una indemnización tras ser expropiado.
Otro retazo es el disputado con Corfo, que es parte de un terreno que superaba los 43.000 m2, pero sucesivas expropiaciones para ensanchar las autopistas aledañas lo redujeron a casi 4 hectáreas. Los dineros provenientes de aquellas expropiaciones, más de $ 300 millones, están provisionados esperando saber a quién entregárselos. En un primer juicio, de manera insólita, ambas partes perdieron.
Hace casi dos décadas, Corfo interpuso un requerimiento contra una solicitud de los Goycoolea para obtener un "comodato precario" por el paño. El ente estatal contestó con una demanda. En 2009 el tribunal la rechazó, pero reconoció que se estaba en presencia de un problema de "deslindes de terrenos", dando un reconocimiento explícito a los Goycoolea de que sí tienen derechos sobre parte del paño.
Según expertos, y dado que el plan regulador ordena que al menos dos tercios de todo el terreno debieran ser destinados a áreas verdes, el paño tendría un valor superior a los US$ 130 millones. Para los Goycoolea, la mejor solución sería vender en conjunto, por lo que el siguiente paso, en caso de que se ratifique que son dueños de una parte del terreno, sería solicitar un peritaje para definir con claridad cuánto le corresponde a cada parte. Para Corfo, hoy esta no es una alternativa.