Discusión por proyecto de cuotas pesqueras llega al Senado con fuerte oposición de la industria y sus trabajadores
Aunque la confederación de artesanales apoyó la iniciativa, los trabajadores de Friosur -que comparten la propiedad de la pesquera- y gremio del Biobío alertaron de las consecuencias del proyecto.
Por: Martín Baeza | Publicado: Jueves 28 de noviembre de 2024 a las 04:00 hrs.
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Ante la demora en la tramitación del proyecto de nueva Ley de Pesca, en septiembre, el Gobierno cambió la estrategia e ingresó por separado el articulado del fraccionamiento pesquero, es decir, aquel que distribuye las cuotas -por especie- entre los sectores artesanal e industrial.
A pesar de la fuerte oposición de la industria y las alarmas que han encendido las compañías, este proyecto ha avanzado con rapidez y, luego de aprobarse con una abrumadora mayoría en la Cámara de Diputados, este miércoles comenzó su análisis en la Comisión de Intereses Marítimos, Pesca y Acuicultura en el Senado, a la cual asistieron distintos actores de los distintos sectores de la actividad.
Entre los protagonistas de la discusión estuvo la Cooperativa de Trabajadores de Friosur, quienes desde 2020 cuentan con un 20% de la propiedad de la pesquera ligada a José Luis del Río.
“Nosotros creemos que necesitamos una buena Ley de Pesca y lo que vemos hasta el momento, lamentablemente, se aleja bastante de ese concepto”. Así inició su crítica exposición el representante de la Cooperativa, Mariano Villa. “Necesitamos una legislación que no ponga en riesgo el desarrollo regional. En el caso de Aysén, es una región altamente dependiente de lo que es la pesca”, planteó Villa, quien aseguró que fue tras “40 años de lucha” que llegaron a ser socios de la pesquera: “Todo el mundo nos alabó cuando conseguimos esto. Se transmitió por televisión. Y, sin embargo, hoy día vemos que parte de nuestro patrimonio también está en riesgo. Porque nos están quitando el 33% de las cuotas globales que nosotros capturamos”.
Incluso, acusó que existen agrupaciones artesanales que reclaman más cuotas y que hoy día ni siquiera hacen uso de sus porcentajes completos. “Si ustedes nos quieren quitar más cosas para que queden en el agua, díganlo así directamente”, lanzó.
Alertas por empleo
Dentro de la Comisión, también expuso la presidenta de los Pescadores Industriales del Biobío, Macarena Cepeda, quien señaló que esta región está pasando por una situación socioeconómica preocupante en sectores como la construcción y la industria forestal, a lo que se sumó la crisis derivada del cierre de Huachipato.
“Son pocas las actividades en Biobío que son motor de desarrollo y una de ellas es la pesca industrial. Hoy, afortunadamente, no está en una crisis, pero podría estarlo de avanzar el proyecto que salió aprobado de la Cámara”, advirtió.
También tomó la palabra la presidenta de la Confederación de Pescadores Artesanales, Zoila Bustamante, quien se manifestó a favor del proyecto de fraccionamiento, aunque, de todos modos, solicitó clarificar aspectos de la iniciativa.
“Más allá de que ganemos o no ganemos cuota, si va a haber una distribución, ¿cómo se va a hacer? Si bien es cierto que tenemos muchos compañeros que pescan, también tenemos otros que no pescan y venden los papeles. Entonces, pesca para el que pesca”, dijo.
Asimismo, llamó a abordar otros temas: “No hay que olvidar también que hoy día estamos regidos por una Ley de Biodiversidad donde hay parques marinos que nos quieren sacar del ecosistema. Entonces todo eso tenemos que verlo. Si este proyecto de ley no tiene un plazo vigente, es letra muerta”.
Senador Núñez (PC) acusa “campaña del terror” de la industria
Quien respondió a las críticas al proyecto, fue el senador Daniel Núñez (PC), autor de la polémica Ley de la Jibia, que determinó que sólo se podía pescar esta especie con potera (técnica artesanal). Tras aprobarse en 2019, algunas pesqueras dejaron de explotar la jibia, cerrando plantas y desvinculando trabajadores.
Luego de que ese caso fuera usado como ejemplo por la industria, Núñez dijo que “siempre que en Chile se hacen cambios surgen lo que se llaman las campañas del terror”.
A modo de ejemplo, dijo que los gremios mineros estuvieron en esa misma sala señalando que el royalty paralizaría las inversiones y que ahora ya se estaba viendo una ola de inversiones por US$85.000 millones.
Aunque admitió que hubo una caída con la Ley de la Jibia, aseguró que la actividad ya iba “acercándose a lo que era históricamente”.
Finalizó diciendo que “nadie está condenando a la desaparición a la industria pesquera”, ya que es “un actor insustituible”, pero estimó que hay un ciclo virtuoso cuando los industriales, en vez de extraer por sí mismos los peces, compran a los artesanales pagando más.