La estrechez del mercado eléctrico y su consecuente efecto al alza en los precios de la energía, llevaron al gobierno a acelerar el proyecto que unirá el Sistema Interconectado del Norte Grande (SING) con el de la zona central (SIC).
Mientras los cálculos del Ejecutivo hablan de una reducción de los costos marginales hasta los US$ 80 el MWh en el largo plazo y de una mayor seguridad en el suministro, un análisis de la clasificadora de riesgo Feller-Rate deja en evidencia los beneficios que tendrá gracias al eventual ingreso de nuevos competidores, ya que la integración permitirá eliminar las barreras que existen actualmente en esa industria.
Si bien se mantendrán los actuales niveles de concentración (las cuatro mayores empresas tendrán el 80% del mercado), el SIC sumará un amplio número de compañías generadoras medianas y pequeñas (cerca de 90), las cuales podrían suplir la demanda de clientes mineros provenientes del SING.
"La posibilidad de servir nuevos proyectos de la zona norte, que exigen costos eléctricos cada vez más bajos, impone el desafío a los generadores de desarrollar tecnologías confiables, eficientes y con bajo impacto ambiental", señala el informe.
Lo anterior, continúa, permitirá que los procesos de licitación sean más competitivos debido a la inclusión de generadores y proyectos de distintas zonas del país, "los cuales por barreras técnicas no pueden empalmarse actualmente".
Actualmente, en el SIC son tres empresas las que concentran el 60% de la capacidad instalada, mientras que en el SING sólo dos poseen el 80%. "Con la integración, las cuatro mayores empresas tendrán cerca del 80% del mercado".
Impacto en transmisión y carretera eléctrica
El análisis de Feller-Rate también adelanta un escenario de mayor competencia en transmisión. Aunque no espera mayores cambios desde el punto de vista del marco regulatorio de concesiones y monopolios regulados, destaca que si el Estado pretende un sistema con mayor robustez y libre circulación de energía desde los distintos puntos de generación hasta diferentes puntos de consumo, se gatillaría "un importante aumento en los proyectos de inversión".
Si a esto se suma la mayor certidumbre que dará la carretera eléctrica, agregan, habrá un contexto más competitivo que atraerá "empresas extranjeras para postular en los procesos de licitación públicos y privados".
Frente a esto, prevé Feller, las firmas locales tendrán el desafío de una competencia más fuerte "dada las estrategias de diversificación hacia economías emergentes que siguen llevando a cabo empresas de ingeniería y construcción en todo el mundo, lo cual impactaría los márgenes ante mayores presiones de precios en concursos de licitación". Lo mismo sucedería en distribución. El informe ve como positivo un sistema interconectado único, pues otorga un mayor número de interesados en los procesos de licitación de energía en comparación al SING (que posee una cantidad menor y más concentrada de oferentes). Aún así, lograr precios más competitivos en estos procesos dependerá del desarrollo de una una matriz más eficiente.
Mantienen clasificación
El informe de Feller concluye que la interconexión SIC-SING tendrá un impacto "acotado" sobre las clasificaciones crediticias de las empresas generadoras, transmisoras y distribuidoras. Según su informe, el nuevo escenario plantearía una serie de desafíos a los distintos actores, pero la mantención del marco regulatorio existente permite sostener los flujos que muestran estas compañías. De todos modos, la clasificadora de riesgo señala que en el caso de las generadoras "mantendrá un monitoreo sobre el correcto funcionamiento de la interconexión y el sistema de tal forma que éste mantenga una confiabilidad que no impacte los flujos y las necesidades de inversiones de los actores del sistema".
¿mayor confiabilidad?
Con el nuevo sistema, la matriz sufriría algunos cambios propios de la integración. Habría una menor exposición a la disponibilidad hídrica, ya que pasaría del 43% de la potencia instalada en el SIC a sólo un 33% con el nuevo sistema.
Esto, debido al aporte termoeléctrico del norte grande, lo cual "implicaría una mejora en la confiabilidad a través de una mayor producción en base a combustibles térmicos, limitando la exposición del suministro y los precios spot a la estacionalidad y los ciclos de la hidrología", explica el análisis de la clasificadora de riesgo.
No obstante lo anterior, ese menor riesgo se vería compensado por una mayor exposición al precio del combustible y a la confiabilidad de los proveedores para asegurar la disponibilidad del mismo, concluye el informe.
el cambio que quiere GDF Suez
La firma busca que se cambie a corriente alterna, pues ya posee un proyecto aprobado de esta tecnología. También querría cambiar los puntos de conexión, estiman en el mercado, porque ha ofrecido a potenciales clientes conectar su central Mejillones y contratarla en el SIC. Además, al quedar establecida su línea como troncal, el pago de ésta debe ser en el formato 80% (generadoras) 20% (clientes). En cambio, si no se considera troncal, deberá cargarla a los clientes.
La complicación de Colbún
La compañía de los Matte no tiene generación en la zona norte y, por tal razón, no tendría razón aparente para oponerse, como si le ocurriría a AES Gener. Sin embargo, su rechazo estaría fundamentado en el sistema de cobro de la línea, si es considerada parte del sistema troncal. Si se aprueba -trasladando la zona de influencia común al norte y no sólo hasta Quillota- 80% del costo deben asumirlo las generadoras. Entonces, Colbún no querría tener que pagar por algo que no podría traspasar a ningún cliente al no estar presentes en la zona.
La oposición de Gener
AES Gener es la segunda, además de Colbún, que pide que no se incluya la interconexión dentro del plan de expansión. La oposición de la firma, estiman en el mercado, es que a través de Guacolda es el principal suministrador de energía de los clientes mineros y no quiere perder esa posición, sobre todo en un área que tiene los costos marginales más altos del país. Otro punto es que en los próximos años vencen algunos contratos y le gustaría evitar la competencia para seguir accediendo a precios atractivos.