El grupo bancario Citigroup subrayó hoy
que tiene un acuerdo de exclusividad con Wachovia, y que el pacto
alcanzado entre este banco y Wells Fargo supone su "ruptura", por lo
que considera la sorpresiva aparición de este último en escena como
una "interferencia ilegal".
Wells Fargo y Wachovia, uno de los afectados por la crisis
financiera y que fuera el cuarto banco en importancia de EE.UU.,
anunciaron hoy un acuerdo de compra por US$15.500 millones,
pero Citigroup ya había llegado a un acuerdo a principios de semana
para comprar las operaciones bancarias de ese banco en dificultades
por US$2.200 millones.
Este giro abrupto y sorpresivo de las negociaciones entre Citi y
Wachovia ha hecho que el grupo bancario se esté planteando, según
fuentes citadas hoy por la cadena de televisión CNBC, una demanda
contra Wachovia.
"El acuerdo de exclusividad señala que las partes podrían verse
irreparablemente dañadas por su ruptura y que es adecuado tomar las
medidas específicas que se consideren para poner remedio", advierte
Citigroup en un comunicado de prensa, en el que también subraya que
de su parte siempre "se negoció de buena fe".
El pasado lunes Citigroup adquirió las operaciones bancarias de
Wachovia, con sede en Carolina del Norte y que se había convertido
en ese momento en la última víctima de los efectos causados por la
crisis de las hipotecas de alto riesgo.
Este acuerdo, que contaba con el respaldo de las autoridades
estadounidenses, convertía a Citigroup en la mayor entidad bancaria
de EE.UU. en cuanto al total de depósitos, con US$1,25 billones, por delante de JPMorgan Chase (US$911.000 millones) y de Bank
of America (US$785.000 millones).
Tras conocerse el cambio de opinión del consejo de administración
de Wachovia y su preferencia por venderse en su totalidad a Wells
Fargo, Citigroup señaló también que según su acuerdo los accionistas
de Wachovia obtenían un buen precio respecto al valor del cierre de
la bolsa el 2 de octubre.
Además afirmó que desde que el lunes se anunciara el pacto, "Citi
les ha estado proporcionando liquidez".
"Citi ha pedido a Wachovia y a Wells Fargo que pongan fin a ese
acuerdo y no procedan a la transacción, ya que rompe el acuerdo de
exclusividad" previo, afirma en un comunicado, en el que subraya que
la entidad "tiene importantes derechos legales" sobre esa operación.
Wells Fargo, con sede en San Francisco (California) y considerado
como uno de los bancos más solventes del país, además del quinto en
importancia, dijo que ofrecerá 0,1991 acciones propias por cada
acción común de Wachovia.
Esa transacción, que toma como referencia la cotización de
acciones de Wells Fargo en US$35,16 al cierre del jueves,
asigna un valor de US$7 a cada acción de Wachovia, frente a los
US$3,91 al que cerraron ese día.
"Este acuerdo permite mantener intacto a Wachovia y preservar su
valor como empresa, sin el apoyo del gobierno", defendió su
presidente ejecutivo, Robert Steel, en un comunicado.
Para el presidente de Wells, Richard Kovacevich, la operación
"tiene un valor superior" a la de Citigroup, que solo compraba las
operaciones bancarias de Wachovia.
Estos dos bancos regionales tienen, según sus dirigentes, muchas
similitudes, ya que nunca pretendieron ser instituciones nacionales
y están más centrados en la banca comercial que en las grandes
operaciones institucionales.
Wells Fargo y Wachovia indicaron que, a diferencia de la fusión
esta semana de J.P. Morgan Chase y Washington Mutual, en su
operación no ha habido intermediación de la Corporación Federal de
Seguro de Depósitos (FDIC, por sus siglas en inglés), con sede en
Washington.
Por su parte, la Reserva Federal admitió que no ha tenido tiempo
de revisar la venta de Wachovia a Wells Fargo, pero de todos modos
se ocupará de que se protejan los intereses de todos los acreedores.
Este nuevo episodio, consecuencia de la crisis financiera que
golpea a EE.UU. desde hace un año, supone un escalón más en la
concentración de los depósitos bancarios de este país en las manos
de solo tres instituciones: el Bank of America, JP Morgan Chase y
Wells Fargo, el último en llegar, y que entre ellos concentraría el
30 por ciento de todo el sector.