Mal le ha ido a Curauma en su estrategia de llevar hasta el Tribunal Constitucional el litigio en la Corte Suprema que mantiene con EuroAmerica.
Y es que la primera sala de la entidad declaró como inadmisible el requerimiento de inaplicabilidad por inconstitucionalidad, presentado por Manuel Cruzat y Antonio Espinoza Pizarro, en representación de la fallida.
Se señalaba en el escrito, presentado en la última semana de abril, que existía una inhabilidad por parte del uno de los jueces, que falló en la Corte de Apelaciones, ya que era cuentacorrentista del Banco de Chile, por lo que buscaban que la inhabilidad sea de forma directa, es decir, que no se tenga que solicitar, sino que sea de forma automática.
Teniendo en cuenta lo anterior, la presidenta de la sala, la ministra Marisol Peña Torres, indicó en el fallo que de la “sola” lectura se desprende que no concurren los presupuestos constitucionales y legales “para que la acción deducida pueda prosperar”, ello agregando que “las disposiciones reprochadas no pueden tener aplicación en la gestión judicial invocada.
Además, indica que el requerimiento de inaplicabilidad no es “vía idónea” para reclamar en contra de las resoluciones judiciales, “con mayor razón, si las normas legales presuntamente inconstitucionales, ya han sido aplicadas”.
También indicó que la sentencia interlocutoria cuestionada ha sido dictada con antelación a la impugnación sobre integración ilegal del tribunal o a la renuncia de la causal de recusación.
Además con posterioridad, Curauma presentó otras tres solicitudes de inaplicabilidad por inconstitucionalidad, los cuales no fueron admitidos a trámite ya que uno de los certificados no contiene todas las menciones exigidas.
Es por ello que el tribunal dio un plazo de tres días para “subsanar los defectos”.
Cabe recordar que desde que se decretó la quiebra, hace tres años, los acreedores de la compañía han logrado que se rematen apenas cinco terrenos -de una sociedad ligada, Parques y Jardines La Luz-, por cerca de $ 424 millones.