Invariabilidad tributaria para la inversión de chilenos y de extranjeros, como avanzar en un plazo de diez años hacia una tasa de impuesto a las empresas de 18%, planteó este martes la candidata presidencial de la UDI y RN, Evelyn Matthei, como parte de un escenario para que el país acelere la expansión de la actividad económica.
Al participar en el seminario “La Ruta del Crecimiento”, organizado por Banco de Chile y Banchile Inversiones, la exalcaldesa de Providencia destacó la decisión adoptada en Irlanda, país que instauró un gravamen corporativo de 12,5%, en circunstancias que en Chile se optó por un 27%.
Ir hacia el 18% en una década “requerirá de un complejo diseño de rebajas, sujetas a crecimiento, de eficiencia en el gasto y en la recaudación”, dijo la exministra.
Además, destacó la importancia de que el Congreso logre llegar a acuerdos y “nos acompañe” para hacer realidad sus propuestas de campaña.
En esta línea, Matthei también recordó la invitación que ha hecho a los candidatos José Antonio Kast (Republicanos) y Johannes Kaiser (Partido Nacional Libertario) a participar de primarias y unir al sector con el fin de llegar con mejor piso de representación al Congreso. Sin embargo, admitió: “Mi llamado no tuvo eco”.
Sumado a eso, la exalcaldesa de Providencia expresó que tras los intentos de llevar adelante una reforma tributaria, está convencida de que se debe fortalecer la seguridad jurídica y que se ha disminuido "la confianza en el país”.
Por ello, la candidata de la centroderecha dijo que en Chile “necesitamos instaurar nuevamente una norma de invariabilidad tributaria para capitales chilenos y extranjeros”. Agregó que ello se debe impulsar para "proyectos que tengan largos periodos de recuperación de capital”.
En esa línea, concluyó con que para realizar ese trabajo “se requiere conocimiento, coraje, gestión y equipos coordinados”.
Un zoom a sus principales propuestas
En el mismo discurso, Matthei entregó sus principales propuestas en diferentes materias, una de ellas la seguridad. Según indicó, esta temática es su primera prioridad e implica el fortalecimiento de las fuerzas de seguridad y el uso de inteligencia para el control fronterizo y desmantelamiento de redes criminales.
Además, afirmó que se enfocará en “el aumento de presencia policial y militar en zonas críticas y puntos estratégicos”. Junto con eso, dijo que buscará el endurecimiento de penas criminales, reforzar el Ministerio Público, promover la inteligencia financiera y mayor intervención social.
También, la economista mencionó que se requieren crear “programas educativos y becas en comunidades con alta incidencia delictiva, generación de empleo juvenil, salud mental y rehabilitación para adultos”. En esa línea, sostuvo que “sin una estrategia combinada no podremos lograr un impacto real y sostenible”.
Matthei fue enfática al señalar que así como el actual Gobierno definió la perspectiva de género como un criterio transversal, “yo definiré la perspectiva de inversión y desarrollo”.
“No puedo soslayar la preocupante situación fiscal”
En la instancia, la candidata también lanzó dardos al Gobierno, luego de la presentación que realizó el ministro de Hacienda, Mario Marcel, en que recalcó que el Ejecutivo solo ha incumplido su meta fiscal en 2024.
Así, Matthei afirmó que “es fácil cumplir las metas cuando uno le pide dinero a Corfo”, en referencia a la polémica por los millonarios traspasos desde la Corporación al Tesoro Público en 2023. Palabras que provocaron murmullos en la sala de conferencias del hotel W.
“La Dirección de Presupuesto (Dipres) ha señalado que para el próximo periodo presidencial, hay holguras negativas de US$ 6.000 millones”, dijo la candidata, señaland que dicho monto será el doble, a cerca de US$ 12.000 millones. Y agregó que, en caso de que llegue a La Moneda, heredará “una situación fiscal brutalmente difícil”.
Así, mencionó también que el país vive por un retroceso institucional, que según la exalcaldesa, “ha significado la baja en la credibilidad de las cifras de la Dipres”.
También, advirtió que es necesario “constatar la mala asignación del gasto público”, y que ahora, será responsabilidad de su eventual Gobierno rebajar y reasignar gastos en el aparato público.
“No me mueve lucir una banda presidencial, me mueve entregar a cada persona las herramientas para tejer entre todos esa banda”, concluyó la candidata presidencial.