Las mujeres fueron sin duda una de las grandes protagonistas de las elecciones de este fin de semana. El mecanismo de la paridad que aprobó el Congreso obligó a que los partidos buscaran a las mejores candidatas y que muchas de ellas obtuvieran potentes votaciones, superando a los hombres en muchas ocasiones y arrastrando a sus compañeros de lista.
Por ejemplo, en el distrito 11, la primera mayoría por lejos la obtuvo Marcela Cubillos, que superó los 74 mil votos. Eso ayudó a que sus compañeros de lista, Hernán Larraín, Constanza Hube y Bernardo Fontaine también salieran electos.
Pero en el mismo distrito, otra mujer se lució. Liderando la lista Apruebo Dignidad, Constanza Schonhaut fue elegida convencional con más de 16 mil votos, superando por lejos a todos sus compañeros de lista que no superaron los 7 mil votos. Bárbara Sepúlveda, del distrito 9, también arrasó: la candidata comunista sumó 17 mil votos y la excandidata presidencial, Beatriz Sánchez en el distrito 12 sumó 23 mil votos. En ese distrito, por ejemplo, Benito Baranda obtuvo una votación histórica de 38 mil votos, y arrastró a su compañera de lista María Soledad Cisternas que sacó 10 mil votos, pero por paridad tuvo que ceder su puesto a Juan José Martin, que obtuvo poco más de 2 mil votos.
La excandidata presidencial Beatriz Sánchez fue la primera mayoría de su lista en el distrito 12.
El 13 con paridad a la fuerza
En el distrito 13 la paridad afectó a mujeres. Las primeras cuatro mayorías fueron femeninas: Malucha Pinto (Partido Socialista) obtuvo 23 mil votos, la siguió Ingrid Villena (independiente en Lista del Pueblo) con 15 mil votos, Natalia Aravena (ind. Convergencia Social) logró 10 mil votos y Eleonora Espinoza (RN) con casi 7 mil preferencias.
Sin embargo, solo Pinto y Villena pudieron ser electas, mientras que Aravena tuvo que ceder su voto al comunista Marco Barraza, que obtuvo menos de 9 mil votos; mientras que Espinoza no pudo ser electa, y en su reemplazo asumiría el republicano Luis Silva con menos de 4 mil votos.
En el distrito 10, Teresa Marinovic obtuvo una de las más altas votaciones: superó los 30.500 votos y lideró su lista, y a nivel distrital solo fue superada por el candidato Fernando Atria.
Patricia Politzer fue otra de las que obtuvo buenos resultados siendo independiente en el Distrito 10, donde tuvo más de 25. 500 votos, siendo la única electa de su lista apoyada por el movimiento Independientes No Neutrales.
Sí había opciones
"La integración paritaria forzó a los grupos políticos a buscar candidatas potentes y competitivas. Eso demuestra que sí hay tremendos nombres y que solo era que las cúpulas no las visibilizaban", analizó Julieta Suárez-Cao, académica del Instituto de Ciencia Política de la U. Católica y coordinadora de la Red Politólogas.
La analista se mostró contenta con el resultado del mecanismo paritario y expresó que debería ser ahora el momento de analizar el concepto de cuotas en todas las demás elecciones.
Además, enfatizó que esto revela que "Chile no es un país machista. Aquí nos dimos cuenta que si se encuentran las candidatas correctas y competitivas, que hay muchas, la gente las escoge".
Asimismo, destacó la diversidad dentro del grupo de mujeres electas. Desde activistas feministas como Bárbara Sepúlveda o Beatriz Sánchez, hasta candidatas que no se identifican con esas banderas, como Marcela Cubillos o Teresa Marinovic.
"Eso demuestra que las mujeres no son un grupo de interés político homogéneo, sino que es un grupo diverso y con muchas identidades propias. Lo importante es que esto ayude a que la Constitución tenga una perspectiva de género que puedan representar las mujeres, más allá de si son o no feministas", agregó Suárez.
Un punto clave, dice la experta, es que el reglamento de la convención y la composición de las comisiones sea realmente paritaria.
"Las mujeres deben estar en las comisiones más estratégicas y liderarlas. Sería inaceptable que las enviaran solo a las comisiones de género o infancia, por ejemplo", concluyó.