Un consejero del Banco Central mencionó opción de reducir hasta en 150 pb la tasa, pero se descartó y mayoría discutió 100 o 125 pb
El instituto emisor dio a conocer este jueves la minuta de la Reunión de Política Monetaria (RPM) de enero, que acordó un descenso de 100 puntos base.
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Opciones de 100 o 125 puntos base. Esas fueron las alternativas que analizó el Consejo del Banco Central en su última Reunión de Política Monetaria (RPM) -realizada el 30 y 31 de enero-, donde la entidad finalmente se inclinó por un recorte de 100 pb. para dejar la Tasa de Política Monetaria (TPM) en 7,25%.
Según revela la minuta de dicha reunión -publicada este jueves-, “todos los consejeros estimaron necesarios recortes de tasas más agresivos que los contemplados en el escenario central del Informe de Política Monetaria (IPoM) de diciembre”.
Incluso, el ente autónomo añade que un consejero estimó “adecuado” analizar la reducción de 150 pb, “aunque agregó que para aplicar un cambio de ese orden en la estrategia de política monetaria sería preferible esperar al próximo IPoM”, por lo que dicha opción de recorte fue descartada.
Ante la necesidad de bajar la TPM “a un ritmo más rápido que el previsto hace un tiempo”, las diferencias entre recortar 100 o 125 puntos pasaban más por componentes tácticos, explica la entidad.
En ese escenario, los 100 pb. corrían con ventaja ya que dicha magnitud “no constituiría una gran sorpresa para el mercado”. Pero aquella baja debía ser acompañada de una “comunicación clara en cuanto a que la TPM llegaría a su nivel neutral antes que lo previsto en el IPoM de diciembre”. El ente autónomo añade que ello “privilegiaba el señalizar antes que sorprender, lo que tenía especial valor en condiciones de mayor volatilidad e incertidumbre”.
Con respecto a la opción de 125 puntos, “se indicó que su ventaja era que permitiría acercarse con mayor velocidad a niveles de TPM más bajos”. Ello podría ser “preferible” en un contexto en que la inflación mostraba una rápida caída, y el último dato la ubicaba en 3,9%.
“Un Consejero señaló que esta opción o un recorte mayor eran, a su juicio, los que respondían de mejor forma al escenario macro y reducían los riesgos de una inflación que fuera más baja de lo deseado”, se lee en el documento. Cabe señalar que el consejero Luis Felipe Céspedes fue el único que votó por dicha magnitud.
Pero varios consejeros no estuvieron de acuerdo con subir más de 100 puntos ya que podía generar una volatilidad “innecesaria”.
“Mencionaron que una de las características deseables de la política monetaria era su predictibilidad. Esto no implicaba que el Consejo debía tomar decisiones guiado por lo que esperaba el mercado, sino que él debía guiar al mercado respecto de la evolución futura de la política monetaria”, dice la minuta.
El documento también señala que en el IPoM de marzo se entregarán más antecedentes sobre la trayectoria futura de la tasa clave.
Discusión del escenario externo y local
Dentro de la discusión que tuvieron los asistentes a la RPM de enero, el documento destaca que las condiciones financieras globales se habían vuelto algo más restrictivas, tras datos económicos que habían reducido la probabilidad de un pronto recorte de tasas por parte de la Fed, asegura el ente autónomo. A su vez, las condiciones geopolíticas se habían “deteriorado”.
En el plano local, la actividad económica se había comportado “acorde” con lo anticipado en diciembre. Por el lado de la demanda, el Consejo resaltó que los indicadores ligados al consumo y la inversión no presentaban grandes cambios. En tanto, las condiciones financieras locales se mostraban “estrechas”.
“Hubo coincidencia en que la mayor novedad respecto de la Reunión anterior era la variación negativa de la inflación total y subyacente en diciembre”, dice el documento. El comportamiento, sugería menores presiones inflacionarias, y este sería analizado con detalle en el siguiente IPoM.