Un aumento de la participación de las mujeres en el mercado laboral le puede dar un empujón al PIB en Chile, pero el camino no parece fácil
Un informe de Bci Estudios apunta a la Ley de Sala de Cuna para aumentar la empleabilidad femenina. Cada 1 punto de incremento, sube el Producto en una décima.
Por: Catalina Vergara | Publicado: Miércoles 20 de noviembre de 2024 a las 10:09 hrs.
T+
T-
Compartir
La participación laboral femenina puede impulsar el crecimiento económico y mejorar la productividad del país.
Esa es la tesis que busca corroborar en su último informe especial el equipo de Bci Estudios, liderado por su economista jefe, Sergio Lehmann.
Si bien, durante los últimos 30 años se aprecia una mejora importante de la participación laboral femenina en Chile, en lo último se ha ralentizado, manteniendo una persistente brecha de género.
A principios de los 90, el porcentaje de hombres que participaban del mercado laboral se encontraba en torno al 74%, cifra que contrasta con un alarmante 32% por parte de las mujeres. Con el pasar de los años, esa brecha fue disminuyendo y para el 2019, la participación femenina se encontraba en 53%, habiendo incluso alcanzado los niveles de la OCDE. Sin embargo, los efectos de la pandemia deterioraron el mercado del trabajo, haciendo caer esta cifra. Para 2023, se ha logrado una recuperación relevante, mas no se han alcanzado otra vez los niveles de la OCDE, además Chile se encuentra bajo Argentina, Brasil y Colombia, entre otros.
¿Cuánto puede aportar al crecimiento?
Según lo recogido por Bci Estudios, la evidencia empírica indica que un 1% de aumento en la participación laboral femenina incrementa el Producto Interno Bruto (PIB) tendencial en un 0,1%.
El cálculo de los economistas considera un aumento gradual -en un plazo de cinco años- de la fuerza laboral femenina en un punto porcentual (pp.), dos pp., tres pp., cuatro pp. y cinco pp.,
En el primer año, se obtiene un crecimiento de 0,1% del Producto tendencial, en el segundo alcanza un 0,13%, en el tercero un 0,17%, en el cuarto un 0,21% y en el quinto año llega a un 0,25% el alza en el PIB tendencial.
Para calcular este efecto, se consideraron las proyecciones de la productividad total de factores, el factor trabajo separando la fuerza laboral femenina y masculina, horas trabajadas y capital humano y el stock de capital.
“El análisis presentado demuestra que un aumento en la participación femenina tiene un impacto significativo en el crecimiento del PIB tendencial”, concluyen.
¿Cómo lograrlo?
Según el informe, algunos factores necesarios para asegurar la participación laboral femenina son equidad salarial, reducir sesgos de género y disponer de mayor flexibilidad para el cuidado de los hijos.
Desde Bci Estudios citan al Informe de Desarrollo Social 2022, el cual asegura que un 37,7% de las mujeres inactivas dice que no pueden trabajar por el cuidado de los hijos.
“Mientras no se tiene la edad suficiente para ir al colegio, las madres carecen de disponibilidad de lugares o recursos para poder dejar a sus hijos, por lo que entran en inactividad y, una vez inactivas, las mujeres tienen tan solo un 12% de probabilidad de volver a la fuerza laboral en comparación al 16% de hombres, según establece el Banco Central en su estudio del 2018 llamado “Mercado Laboral: Hechos estilizados e implicancias macroeconómicas”, se lee en el documento.
De acuerdo con el equipo liderado por Lehmann, muchos estudios muestran que “la principal forma de mejorar las condiciones del mercado laboral femenino, en términos de participación, productividad, salarios y reducción de la pobreza, es mediante la disponibilidad de cuidado para los menores dentro de los primeros años”.
En el caso chileno, la Ley de Sala Cuna establece que las empresas con 20 o más trabajadoras dependientes que cuenten con hijos de menos de dos años deben financiar o proveer el servicio de sala cuna.
A juicio de los economistas del banco, esta ley presenta dos problemáticas: hace caso omiso al hecho de que los niños cuentan con un padre y madre, manteniendo los estereotipos de género en la sociedad, y deja sin beneficio a aquellas madres que trabajan en micro y pequeñas empresas o que son independientes.
El nuevo proyecto de ley en trámite amplía el beneficio de sala cuna para todos los padres y madres dependientes, independientes y asesores de hogar; e implementará un “Sistema Mixto de Cuidado” que contará con el sistema institucional y un domiciliario, vecinal y comunal, de manera de ampliar la oferta y disminuir costos.
“Como Bci Estudios, creemos que es fundamental avanzar en proyectos que logren una mayor participación femenina la cual traerá beneficios tanto a nivel personal como a nivel país, además de incrementar el desarrollo infantil temprano y la equidad de género”, declaran.
“Será necesario implementar y darle sentido de urgencia a la modificación del Código del Trabajo respecto de la sala cuna universal apuntando a madres y padres, sin importar el número de empleados”, suman.