Una discusión más polarizada que la del lunes, vivió ayer la mesa de diálogo entre diputados de la Comisión de Educación, profesores y el Mineduc, con el objetivo de llegar a acuerdo por el proyecto de Carrera Docente.
El magisterio comenzó la sesión sin señales de querer flexibilizar su crítica postura a la iniciativa, asegurando que posponer el paro “pasa por redactar un nuevo proyecto”. Incluso miembros de la directiva gremial advirtieron que “nuestro movimiento se radicalizará”, si no se ofreceuna salida al conflicto.
Sin embargo, cuando quedaban 20 minutos para que acabara la sesión, el ministro del área, Nicolás Eyzaguirre, intervino dando algunas luces de los cambios que el Ejecutivo pretende hacer al proyecto.
Generando sorpresa en los presentes, el secretario de Estado afirmó que si existe una mayoría sustantiva en la comisión, está dispuesto a avanzar en reducir la cantidad de alumnos por aula, atendiendo así a una demanda histórica del gremio.
El proyecto no se refiere a este tema, y la norma vigente establece un máximo de 45 estudiantes por clase. Según planteó Eyzaguirre, la implementación de la medida debe ser paulatina, “no se puede hacer de golpe y porrazo”. Esa es la única manera que el proyecto no comprometa nuevos recursos, pues según el Mineduc la idea es que exista una redistribución de alumnos -desde aulas demasiado llenas a otras más vacías- y no que el colegio tenga que invertir en una mayor infraestructura o más profesores. Así mismo, cerró las puertas a que el Estado invierta más que los US$ 2.300 millones ya comprometidos para este proyecto, asegurando que jamás se había hecho una “inyección tan grande de recursos” en el área.
Otros cambios
“Touché”, dijo el ministro antes de conceder un nuevo punto al magisterio. Ante la preocupación docente por las bajas pensiones, el Ejecutivo señaló que no se obligará a los maestros que estén en edad de jubilar a salir del sistema.
Además, el Mineduc afirmó que evaluará la forma para que profesores destacados avancen más rápido en la carrera para lograr que el aumento salarial se concrete más temprano.
Pese a los cambios esbozados, el presidente del gremio, Jaime Gajardo, afirmó que “necesitamos un documento escrito del Ejecutivo para evaluarlo mañana en la asamblea”, instancia en que el magisterio discutirá si continúa en paro. Los diputados de la instancia se comprometieron a entregar un texto con propuestas, pero dado que muchas indicaciones son de facultad exclusiva del Ejecutivo, los maestros esperan que sea el Mineduc el que dé garantías de cambios.
El tema que faltó
Uno de los nudos más complejo es la certificación de los profesores. El magisterio rechaza categóricamente lo enunciado en la iniciativa, pidiendo reducir la cantidad de pruebas y modificar los instrumentos de evaluación. El Ejecutivo mantiene su postura de que el mérito sea el “elemento clave” para el alza salarial, sin intención de retroceder en el punto.