Starken da el salto: abre división internacional y busca que ingresos de este negocio lleguen a US$ 16 millones a 2025

Starken está escribiendo un nuevo capítulo en su historia.Cuando la compañía se fundó hace un poco más de una década, el brazo logístico de la familia Diez-Martínez usaba carros arrastrados por la flota de Turbus -el negocio principal del holding- para movilizar la carga. Hoy, la empresa creció tanto que no solo cuenta con su propio transporte, sino que también tomó la decisión de internacionalizarse y abrir una división exclusivamente para enviar y recibir paquetería fuera de Chile.

La idea del negocio partió en plena pandemia, cuando Starken duplicó su tamaño ante el boom del e-commerce. Eso implicó ampliar la capacidad de sus instalaciones e incrementar los centros de distribución. A 2023, la firma cuenta con 22 recintos en todo el territorio y 300 puntos de reparto entre Arica y Punta Arenas.

Sin embargo, el equipo liderado por el gerente general de Starken, Rodrigo Prida, decidió ir un paso más allá y probar con la movilización de carga hacia el extranjero. No fue hasta 2022 tras los primeros pilotos que se montó una infraestructura para escalar el negocio y abrirlo a todo público: desde grandes corporaciones, PYME, hasta clientes finales.

“Nos dimos cuenta que hay una gran necesidad, porque hay una carencia de información y podemos convertirnos en una especie de asesor para nuestros clientes”, dijo Prida.

El inicio del negocio

Starken busca competir mucho más agresivamente contra Chilexpress, DHL o Blue Express, algunos de los principales rivales del segmento. Por eso, en 2022, Prida compró una máquina de US$ 2 millones para clasificar los pedidos más pequeños y acompañar a la distribuidora principal, de modo de aumentar la capacidad con miras al negocio internacional.

“A diferencia de la máquina más antigua, que tiene una capacidad para bultos más grandes, de hasta 50 kilos, la nueva nos permite clasificar desde teléfonos hasta cosas más chicas con una capacidad de hasta 6.500 paquetes por hora”, apuntó.

Para 2024, Starken busca transportar 18 millones de paquetes, de los cuales en sus primeros 12 meses de operación el negocio internacional representará 2,5 millones de ese total. En la nueva división se esperan US$ 8 millones de ingresos, pero la apuesta es duplicar las recaudaciones a 2025.

“El 80% de nuestros ingresos van a venir por la línea de crossborder (transporte de mercancía fuera y hacia Chile). Este mercado es un gigante que explotó en la pandemia, pero que ahora está funcionando a niveles más normales”.

“El 80% de nuestros ingresos van a venir por la línea de crossborder (transporte de mercancía fuera y hacia Chile). Este mercado es un gigante que explotó en la pandemia, pero que ahora está funcionando a niveles más normales”, expresó.

La compañía tiene actualmente 150 camiones, 500 camionetas y 1.500 vehículos última milla para desarrollar sus planes. De acuerdo a Rodrigo Prida la idea es poder incrementar un 40% su flota con la nueva división que se pondrá en marcha, especialmente en unidades especializadas en delivery al cliente final.

Fin al boom de operadores

Ante los confinamientos y el alza de la demanda se disparó el número de empresas que se dedicaban al negocio logístico. Y es que los operadores tradicionales no daban abasto frente al incremento de pedidos. No obstante, los tiempos de bonanza terminaron entre los últimos meses de 2022 e inicios de 2023 porque el consumo comenzó a desacelerarse.

“Nacieron miles de operadores logísticos, no fueron pocos. El negocio se llenó, porque había espacio para todos. En esa época, en Starken decidimos crear nuestra área innovación para justamente encontrar solución a esta explosiva demanda. Lamentablemente para ellos, eso se terminó y hay muchas empresas que dejaron de existir, pero otras que continúan y nosotros trabajamos con varios partners”, dijo Prida.

Durante esa época Starken tenía una red enfocada a conectar todo Chile, pero todavía no tenía desarrollada una logística tan puerta puerta en la Región Metropolitana. Por esta razón, desarrolló un modelo de negocio con varios socios locales para hacer frente a la alta demanda. “Nuestro músculo fuera de la capital es tremendo, y ellos lo necesitaban para poder crecer. En cambio, Starken necesitaba esa inteligencia de las startups. Ahora contamos con una gerencia en innovación que se encarga de mirar el negocio”, aseveró.

En 2021, Starken contrató una consultora para poder planificar su infraestructura en los próximos 10 años. Esto dio origen a un “plan maestro” de expansión que contempla hubs, mini hubs y sucursales con entrega de última milla, que les permitirán ser cada vez más eficientes y con foco en gestión operativa.