Fintual y el tipo de cambio a $ 800: "No parece que el rally del peso chileno se haya extendido demasiado"
La economista jefa de Fintual, Priscila Robledo, explicó que en términos reales y multilaterales la paridad ya se encuentra en niveles previos al estallido social, principalmente debido a un cambio en la percepción de riesgo local.
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Desde su máximo histórico de $ 1.051 registrado en julio, el precio del dólar acumula una serie de caídas que lo han llevado a visitar recientemente la marca de los $ 800 e incluso bucear por debajo en negociaciones intradía.
Lo que desfila en las pantallas de los operadores es una recuperación del shock sufrido por factores principalmente domésticos a partir de 2019, sostuvo en entrevista con DF la economista jefa de Fintual, Priscila Robledo.
“La percepción de riesgo político bajó mucho desde que se rechazó el proyecto constitucional, y además el Banco Central está comprometido con cuidar el tipo de cambio”.
“El capital ha estado saliendo de Chile y la tendencia de largo plazo es una depreciación del peso”.
“Creo que hay razones para pensar que la Fed encontrará espacio para bajar la tasa a finales de año”.
Consultada por el impuesto al patrimonio que forma parte del proyecto de reforma tributaria, señaló que podría contribuir a depreciar al peso chileno en el largo plazo. En cuanto a la Reserva Federal, ve que podría empezar a recortar la tasa oficial hacia fines de año.
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- ¿En Fintual consideran que se justifican las caídas que esta semana terminaron por ubicar al tipo de cambio en niveles de $ 800?
- Uno nunca puede decir si una moneda está cara o barata, pero sí podemos decir que en términos reales multilaterales -es decir, comparando con monedas emergentes y ajustando por inflación-, el peso no está más apreciado que en los niveles donde estaba en 2018, por lo que no parece que su rally se haya extendido demasiado.
Es importante saber dónde estamos parados. En términos reales multilaterales, el peso llegó a mediados de julio a su peor nivel desde al menos 1994, que es donde empieza la serie.
Esta depreciación fue casi totalmente por temas domésticos. Principalmente una mayor percepción de riesgo en base a temas políticos y desbalances muy profundos que Chile tuvo a raíz de sus intentos de paliar la pandemia.
El país estuvo en todo este tiempo desahorrando, lo que se reflejó en una balanza por cuenta corriente cercana a 10% del PIB. En términos simples, Chile estuvo gastando más de lo que ingresa y tuvo que comprar más bienes y servicios al resto del mundo de los que vendió. Esto lo financió con flujo de portafolios, que son mucho más volátiles en comparación a los flujos de inversión directa.
- ¿Y qué es lo que están descontando ahora los agentes del mercado?
- El precio del cobre ayuda a que el tipo de cambio real multilateral esté un poco por encima del nivel previo al estallido social, porque también está por encima de esos niveles, pero la mayor parte es por menor percepción de riesgo político y por una tasa real del Banco Central bastante alta, perspectivas estables de inflación y una cuenta corriente que probablemente ya empezó a mejorar.
La percepción de riesgo político bajó mucho desde que se rechazó el proyecto de la nueva Constitución, y además el Banco Central está comprometido con cuidar el tipo de cambio.
Factor tributario
- ¿El mercado ya se hizo una conclusión respecto de las reformas previsional y tributaria?
- Creo que no se ha hecho una percepción muy clara, porque tampoco hay mucho espacio para eso. Sí creo que lo que quedó muy claro desde el plebiscito constitucional de salida fue una disminución de los riesgos de cola. Los escenarios más extremos quedaron de lado, y por eso el alivio del mercado.
- ¿Qué reacción podría esperarse del peso chileno frente a una medida como el impuesto al patrimonio?
- Este tipo de impuestos no son nunca bien recibidos por el mercado, porque los grandes patrimonios tratan de retirar capitales del país y llevarlos afuera, y lo que pasa ahí es que hay menos ahorro doméstico y se tienden a aumentar estos desbalances, por lo que tienes que financiarte con el resto del mundo.
En Chile, como hay más ahorro doméstico que en sus pares de Latinoamérica y otros emergentes, la inversión se puede financiar domésticamente y eso ayuda al peso, le da estabilidad.
Pero cuando empieza a entrar en el panorama que se podría cobrar más por estos ahorros domésticos, ahí es cuando empieza la salida del capital. Eso es lo que hemos estado viendo: el capital ha estado saliendo de Chile y la tendencia de largo plazo es una depreciación del peso.
- ¿Cuál es la lectura que hacen en Fintual respecto del aumento de las apuestas contra el peso chileno en los últimos días por parte de los agentes extranjeros?
- En realidad, el posicionamiento neto corto es muy bajo comparado con lo que vimos en la segunda mitad del año pasado. El aumento de los últimos días refleja que una pequeña parte de los inversionistas extranjeros no está convencida de que la apreciación reciente del peso vaya a perdurar por mucho tiempo, y esa visión puede estar fundamentada en muchas cosas, internas y externas, pero por ahora el tamaño de esta apuesta es relativamente pequeño.
Recorte en tasas Fed
- Hemos visto que el mercado busca apostar a que la Fed ponga fin al ciclo contractivo cuanto antes, y por otro lado, los miembros de la Fed quieren transmitir que están muy dispuestos a subir la tasa por encima del 5% y mantenerla ahí. ¿Quién tiene la razón?
- El mercado no le está creyendo a la Fed, primero porque ha estado viendo últimamente que ya empieza a ceder la inflación. Además está la probabilidad de una desaceleración fuerte y la Fed tiene un objetivo dual, que es controlar la inflación y estimular el empleo.
Creo que hay razones para pensar que la Fed efectivamente va a encontrar espacio para bajar la tasa a finales de año. Si vemos qué tanto la Fed se ha ajustado a sus propios pronósticos, la verdad es que su track record no es tan perfecto, porque también ellos tienen que transmitir cierto mensaje para que sus decisiones sean efectivas.
Hay riesgos, porque uno podría imaginarse que con la apertura de China y los precios de los commodities otra vez subiendo, la baja de la inflación vez se retrase, pero no creo que lo suficiente como para que la Fed no encuentre espacio para bajar a finales de año.