Gremio se desmarca de Sauer por facturas ideológicamente falsas
El presidente de EFA, Ricardo Schliebener calificó declaraciones del socio de Factop como “un atentado contra la fe pública”.
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Revuelo causó la entrevista que dio este lunes a DF el socio de Factop, Daniel Sauer, quien señaló que “todos sabemos que existe la factura ideológicamente falsa y que todos los factoring la debemos tener entre un 25% y 30%. Lo que a mí me sorprende de las declaraciones de Rodrigo Topelberg, es que hace tres años nos trae facturas de su barbería, y de su bar que se llama la Vinocracia, donde nos trae facturas ideológicamente falsas y por otro lado, en Factop, sabiendo, las operaron”.
El presidente de la Asociación de Empresas de Servicios Financieros No Bancarios (EFA), Ricardo Schliebener, rechazó que esta sea una práctica en la industria de factoring y sostuvo que las declaraciones de Sauer corresponden a “un falseamiento de información, un atentado contra la fe pública económica y en contra de todos los actores del sistema financiero”.
El líder gremial señaló que como EFA “queremos ser tajantes y afirmar que todos los que trabajamos en esta industria sabemos con certeza que contar con una ‘cartera’ de facturas ideológicamente falsas constituye un delito y en ningún caso dicha situación representa a las empresas que participan en esta industria”, añadió.
Delitos tributarios
“Claramente lo antes descrito podría configurar diversos delitos económicos y de carácter tributario, que por lo que se sabe, la justicia ya estaría investigando”, recalcó.
Schliebener sostuvo que la industria de servicios tiene controles internos, procesos de análisis de riesgos, operativos, compliance y una contraparte rigurosa como “los fondos de inversión e inversionistas institucionales que cotejan la data para aprobar o no las operaciones”.
“Es por ello que una factura falsa es una anomalía y jamás corresponderá a un porcentaje de la cartera”, detalló.
Finalmente, el presidente de EFA concluyó que “la situación comunicada por Daniel Sauer es puntual y correspondería a prácticas corporativas de su empresa y en ningún caso representa la situación de la industria ni de nuestro gremio”.