Banca & FinTech

Carlos Ingham: “El mayor riesgo post Covid-19 es que nos olvidemos de la gente que no tendrá ni trabajo ni para comer”

El exJPMorgan y socio de Linzor Capital relata la situación de hambre que viven muchos hogares en Chile tras la expansión del coronavirus.

Por: Nicolás Cáceres | Publicado: Viernes 5 de junio de 2020 a las 04:00 hrs.
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Buena parte de la vida de Carlos Ingham ocurrió arriba de un avión cuando acostumbraba a ir de país en país cerrando millonarios “deals” para el poderoso JPMorgan, en el que estuvo entre 1989 y 2007, donde fue presidente y gerente general para el Cono Sur (Chile, Argentina, Perú y Uruguay) y miembro del Comité Ejecutivo para Latinoamérica.

Tras su salida en 2007 enfocó sus esfuerzos en fundar junto a Tim Purcell, Linzor Capital, un fondo de inversiones que tiene oficinas en México, Argentina, Chile y Colombia y que maneja US$ 1.300 millones.

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Sin embargo, Ingham, argentino de ascendencia sueca, es un actor atípico del mercado. Además de la reconocida muñeca negociadora de sus tiempos en JPMorgan, desde 2003 comenzó a gestar la idea de crear la corporación sin fines de lucro Red de Alimentos, la cual preside.

Desde esta fundación ha conocido el lado menos amable de la distribución de ingresos en Chile y la capacidad que tienen las personas para alimentarse, que se ha hecho más visible con la expansión del coronavirus.

“Hay muchísima gente que padece de hambre en Chile y que la padecerá por mucho más tiempo por el Covid-19. Si uno mira la encuesta Casen de 2017, en los dos primeros deciles, hay 3,4 millones de personas que viven -sin subsidio estatal- con $ 1.500 diarios. Es imposible no tener hambre con estos números”, describe Ingham.

Durante los últimos meses el socio de Linzor Capital ha sido el puente entre las empresas que han aumentado sus donaciones a Red de Alimentos y la distribución de pallets y cajas con comida e insumos básicos a más de 300 fundaciones que llegan a 240 mil personas.

Comenta que antes del inicio de la pandemia distribuían 550 mil kilos de comida al mes, cifra que en mayo se incrementó en 54% al llegar a 845 mil kilos. Asimismo, revela que previo al Covid-19 trasladaba unos 15 mil kilos de productos de primera necesidad a fundaciones, envíos que en mayo se elevaron a 28.130 kilos.

“En los próximos 30 días, vamos a estar entregando 2,5 millones de kilos de comida y 46 mil cajas de alimentos”, añade.

Los aportes extraordinarios a Chile Alimentos también crecieron. La Fundación Luksic donó $ 750 millones y la CPC les entregó $ 1.500 millones, además de otros recursos que han recibido para financiar una logística más grande.

- ¿Cómo evalúa el rol del gobierno y del sector privado en esta pandemia?

- El sector privado y el Estado han hecho sus mejores esfuerzos para enfrentar esta situación. En mis 27 años viviendo en Chile nunca había visto tanta solidaridad como ahora, incluso más que para el terremoto de 2010.

Este es un problema que toca a todos. Nadie es inmune. Lo que está ocurriendo es que mucha gente se está quedando sin pega, desde un gerente hasta el trabajador de menor rango de una compañía. Y el problema es que el promedio de las personas está muy endeudado, y si te quedas sin trabajo, esa deuda te alcanza en algún minuto.

Creo que el esfuerzo que tendremos que hacer como sociedad será muy grande porque esto no se va a ir la semana que viene. Mi gran temor es que, si mejoran los números de contagios o bajan las cifras de muertos, nos olvidemos de que esto sigue, porque el daño del virus va a durar mucho tiempo ya que la gente que se quedó sin trabajo no va encontrar empleo el día que tengamos cero contagios.

- ¿Este virus provocará cambios en la composición de los segmentos socioeconómicos?

- No soy un técnico en la materia, pero Red de Alimentos ayuda a comer a mucha gente. De lo que vemos en la calle, es que habrá descensos en todos los deciles, no cabe ninguna duda de eso. Aunque estés en el 7, puedes caer al 5. Eso está pasando y lo veo en el aumento de demanda de comida de las fundaciones que atendemos.

- Hace un par de semanas el gobierno fue criticado por la entrega de cajas de alimentos. ¿Cómo ha visto la ejecución de esta iniciativa?

- Nosotros no participamos del programa de entrega de esos 2,5 millones de cajas. Sin embargo, no nos tenemos que olvidar que los primeros dos deciles de Chile son 3,4 millones de personas. Las necesidades son incrementales y van a durar mucho tiempo por lo que todo aporte es positivo.

Por eso reitero: el gran riesgo que existe en Chile es que en unos meses nos olvidemos de la gente que perdió su trabajo y de la que no tiene para comer. Nosotros como Red de Alimentos necesitamos cada vez más recursos, así como también las organizaciones civiles, fundaciones y el propio Estado para abordar esto.

Consumo vs pobreza

- ¿Está de acuerdo con la afirmación de que en Chile la pobreza estaba disfrazada con tarjetas de crédito y que la pandemia dejó al desnudo esta situación?

- No comparto eso. A nadie le cabe duda que ha habido una disminución de la pobreza en Chile en los últimos años. Eso no es discutible y es un dato de la causa. ¿Quiere decir eso que el trabajo se terminó y somos Suecia o Finlandia? No, estamos muy lejos de eso todavía, pero no hay que abandonar este camino.

En Chile tenemos un problema: todo es pendular, todo o nada, y las cosas en la vida son graduales. A los políticos, en el mundo en general, les gusta “meter el palo en la rueda” y eso no contribuye en nada porque hoy es un momento en que hay que estar más unidos que nunca.

Efectivamente hay demasiada deuda individual en Chile, y cuando hay un evento extraordinario como el Covid-19 es un problema mayor, pero las personas son las responsables de tomar sus deudas y no sobrepasarse. No se puede culpar al empedrado.

Impuestos

- ¿La verdadera lucha del país será contra el hambre y la cesantía versus la pandemia en sí misma?

- Lo más importante de esta crisis es que podamos sacar lecciones y que esta red de solidaridad que hoy existe por el Covid-19 sea la base para enfrentar no sólo catástrofes o pandemias futuras, sino que se transforme en un pilar de nuestra sociedad.

Se deben dejar las cadenas de apoyo social que hemos construido de manera robusta y bien armada para que siga habiendo una cooperación público-privada, para que la gente siga ayudando y las empresas mantengan sus donaciones. Ahora, si el país no crece, todo lo que estoy diciendo será mucho más difícil.

- ¿De qué depende entonces?

- Si tuviera que pedirle algo a los políticos es que ayuden a generar condiciones para que haya inversión y eso no se logra aumentando los impuestos. Se deben también simplificar los impuestos e incentivar las donaciones porque en Chile hay más de 50 leyes que son excepciones para poder donar. Eso es mucho.

En la última reforma tributaria se revirtió la carga de la prueba para las empresas, porque ahora la ley señala que, cualquier insumo, materia prima o producto terminado apto para el consumo que no haya sido entregado a entidades sin fines de lucro se considerará gasto rechazado. Eso fue un gran logro que costó mucho alcanzar.

"La realidad todavía no justifica el entusiasmo
de los mercados en el último mes"

- ¿Cómo ve la situación de los mercados tras la baja que han experimentado en 2020?
- El Covid-19 es novedoso porque nunca había ocurrido algo así en tiempos recientes y menos en mercados globalizados como ahora. En el último mes las bolsas han mostrado cierta euforia, pero personalmente, si bien celebro que los mercados suban, me resulta prematuro y no tengo esa euforia.
Creo que estamos lejos de ver una recuperación sostenida y en algunos lugares ya se está hablando de las segundas olas de contagio, que a mí no me parece nada descabellado. En mi opinión, la realidad todavía no justifica el entusiasmo de los mercados en el último mes.
- Considerando la situación de las empresas ¿Ven oportunidades de compras para Linzor Capital?
- Siempre las crisis traen también oportunidades. Muchos fondos de inversión en Estados Unidos, Europa, Medio Oriente y Asia tienen capital fresco disponible, lo que se llama "pólvora seca". Linzor Capital afortunadamente tambien, y es por ello que estamos mirando oportunidades en la región.

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