La Unión Europea y Estados Unidos
intentarán dar mañana avances clave para solucionar algunos de sus
principales problemas comerciales, especialmente la prohibición
europea de importación de carne de pollo estadounidense.
Europeos y estadounidenses celebran mañana en Bruselas la segunda
reunión del Consejo Económico Transatlántico, un foro creado para
eliminar barreras comerciales y financieras, y Washington tiene a la
carne de pollo y los cosméticos como sus grandes prioridades.
El Consejo Económico Transatlántico fue creado en 2007 para
eliminar las barreras innecesarias al comercio, y según la Cámara de
Comercio de EE.UU., la resolución de todos los asuntos pendientes en
la cita de mañana podría generar ahorros o aumento de los
intercambios bilaterales de hasta 6.500 millones de euros anuales.
Estados Unidos no puede exportar pollo a la UE desde hace diez
años debido a que en ese país los animales se desinfectan con una
solución a base de cloro, prohibida en territorio comunitario por
motivos de salud.
Washington considera que esa prohibición no tiene sentido desde
el punto de vista científico, por lo que exige su eliminación.
El comisario europeo de Empresa e industria, Günther Verheugen,
ha asegurado a los estadounidenses que la cuestión no estará
resuelta totalmente para la reunión de mañana, pero sí para la
cumbre UE-EEUU que se celebrará en junio próximo en Eslovenia.
Para Washington, se trata de una cuestión simbólica, ya que el
impacto económico no es muy importante.
El impacto lo cifra en torno a US$ 100 millones anuales,
muy poco comparado con los US$ 620.000 millones anuales en comercio e
inversiones entre ambos lados del Atlántico.
Si los europeos parecen flexibles en este apartado, EE.UU. podría
suavizar las exigencias sobre ensayos obligatorios que recaen sobre
los fabricantes europeos de aparatos eléctricos y electrónicos.
En cuanto a los cosméticos, el problema se deriva de la entrada
en vigor del reglamento Reach sobre los químicos, y que establece
que las empresas tienen que registrar a partir del 1 de junio las
sustancias que ya emplean en sus productos fabricados fuera de la
UE.
EEUU cree que hoy la regulación da más facilidades a las empresas
que fabrican cosméticos dentro de la UE, y calcula que si no hay un
acuerdo, las exportaciones del sector a Europa podrían sufrir daños
de entre US$ 1.000 millones y US$ 2.000 millones anuales.
Sin embargo, ambas partes creen que se puede lograr algún tipo de
solución satisfactoria.
Además, se espera que el martes la UE reconozca los estándares de
contabilidad de EEUU.
Europeos y estadounidenses hablarán también sobre la
certificación ecológica de los biocombustibles, la baja cotización
del dólar o la solvencia de las compañías de seguros y reaseguros.
El consejero del presidente George W. Bush para asuntos
económicos, Daniel Price, y el comisario Verheugen, uno de los
vicepresidentes de la Comisión Europea, encabezarán las delegaciones
en la reunión.