El descenso de Perú en el ranking mundial de competitividad, elaborado por el World Economic Forum, principalmente en el rubro de institucionalidad va a hacer muy difícil que el país pueda ingresar en el grupo de países desarrollados de la Organización de Cooperación para el Desarrollo Económico (OCDE), señaló la Sociedad Nacional de Industrias (SNI).
Según el último ranking mundial de competitividad, Perú bajó cuatro posiciones y pasó del puesto 61 al 65, de un total de 144 países.
“Inclusive para poder calificar y para ser miembro de la OCDE hay una auditoría institucional de las instituciones del Estado y uno tiene que pasarla, entonces hay un trabajo y una tarea muy fuerte, ya que el principal rubro donde hemos retrocedido es el institucional”, aseveró el presidente de la SNI, Luis Salazar.
Para el líder gremial, este retroceso de cuatro puestos “es una alerta a la cual se le debe prestar atención y se deben tomar las acciones de rectificación” que sean necesarias.
“Hemos perdido nueve posiciones en el pilar de instituciones, yo creo que ese es el principal sitio donde tenemos que trabajar. Un país sin institucionalidad va a ser muy difícil que pueda seguir avanzando en el ranking”, enfatizó.
Otro tema importante que se debe mejorar es el vinculado al tributario, donde la nación perdió 35 puestos y, según Salazar, se debe a los efectos que tienen los impuestos en el incentivo a la inversión.
“También se habla de despilfarro del gasto público, donde también hemos caído al puesto 119 y que representa 28 posiciones menos que el año anterior. Esto significa que la gente no está percibiendo que el gasto se está haciendo adecuadamente”, comentó.
Manifestó que los peruanos ya reconocen que el país tiene una mucho mejor recaudación fiscal e inclusive saben que se ha aumentado la presión tributaria pero eso se debe controlar, ya que esa presión es asumida por los contribuyentes formales y no comprende a los informales.