La tasa anual
de inflación en la India se situó en el 7,33% en la segunda semana de abril, lo que supone un ligero aumento respecto
a la semana anterior (7,14%), según datos oficiales publicados hoy.
Durante la semana aumentaron los precios de los alimentos, pese a las medidas
anunciadas por el Gobierno para controlar los precios a finales de marzo.
La inflación había sido entonces del 7,41%, lo que supuso un máximo
en 40 meses y llevó a los partidos de la oposición a convocar protestas contra
el incremento de los precios.
Poco antes de conocerse los datos de la inflación, líderes de los partidos de
izquierda se reunieron con el primer ministro indio, Manmohan Singh, y le
propusieron nuevas medidas de control de precios, según informó la agencia india de noticias IANS.
Los comunistas, aliados del Gobierno en el Parlamento, pidieron una reducción
en el arancel del petróleo y una prohibición del mercado de futuros en 25
productos.
Tras la reunión, Singh anunció que "el Gobierno tomará medidas para
controlar la inflación. Esperamos un monzón normal y crecerá la disponibilidad
de comida. La recolección de grano irá al alza", añadió.
El gubernamental Partido del Congreso ha sido objeto de críticas tanto por
parte de la oposición como de sus aliados por su incapacidad para controlar el
aumento de los precios.
La opositora Alianza Nacional Democrática (NDA) formó, incluso, este jueves una
cadena humana fuera del Parlamento en protesta por la actuación del Gobierno en
la materia.
Desde el Gobierno, el ministro de Finanzas, P. Chidambaram, ha asegurado en el
Parlamento que el Gobierno considera nuevas medidas, aunque estas podrían
desacelerar en parte el crecimiento económico.
"La inflación está relacionada con los precios internacionales de los
productos", aseguró.
El Gobierno aprobó en marzo un recorte de impuestos de importación sobre varios
alimentos y prohibió las exportaciones de arroz no-basmati para aliviar el
aumento de los precios.