Toyota, la automotriz japonesa presionada para que construya más vehículos en Estados Unidos, advirtió ayer que la política comercial estadounidense es un riesgo para la empresa, como también lo es la salida que el Reino Unido planea de la Unión Europea.
Pero la compañía señaló que seguiría fabricando tres millones de vehículos en Japón, algunos de los cuales se exportan a Estados Unidos, incluso en momento en que analistas advirtieron que la empresa podría verse forzada a cambiar de opinión si la política del presidente estadounidense de “EEUU primero” lleve a un colapso del Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (Nafta, su sigla en inglés) entre EEUU, Canadá y México.
En tanto, la automotriz elevó su meta de ganancias para el año que termina en marzo de 2017 desde 1,55 billones (millones de millones) de yenes a 1,7 billones de yenes (US$ 15.100 millones) apuntando a las expectativas de un yen más débil. Sin embargo, la cifra se quedó por debajo de las expectativas de los analistas.
“Vemos el impacto de las políticas comerciales de la nueva administración estadounidense como un riesgo económico”, dijo Tetsuya Otake, el director de operaciones de Toyota, añadiendo que la empresa también ve las elecciones en Francia y Alemania este año, al igual que las negociaciones británicas para salir de la UE, como factores de riesgo.
El panorama de Toyota se ha ensombrecido luego de que Trump amenazara a la empresa con castigarla por sus planes de construir una nueva planta en México, y criticara a Japón por lo que describió como un mercado cerrado para los automóviles hechos en EEUU. Toyota ha respondido con una promesa para invertir
US$ 10.000 millones en los próximos cinco años, incluyendo propuestas para sumar 4.000 trabajos en su planta de Princeton, Indiana.
Un encuentro el viernes entre Akio Toyoda, presidente de Toyota, y Shinzo Abe, primer ministro japonés, ad portas de la visita de este último a EEUU esta semana, ha generado especulaciones de que los dos hombres discutieron cómo la empresa podría producir más vehículos en Estados Unidos.
Koji Endo, analista de SBI Securities, dijo: “Toyota exporta el mayor número de autos a EEUU (entre las automotrices japonesas) así que cualquier cambio en políticas monetarias y comerciales, como Nafta, la golpearán con más fuerza”.
En tanto, Toyota y su rival Suzuki, dijeron que lanzarán conversaciones para colaborar en materias de medioambiente, seguridad y tecnologías de la información.