Mientras altos funcionarios de la UE trabajaban para acordar medidas de corto plazo que reduzcan los costos de financiamiento de España e Italia en la víspera de la cumbre de hoy, la canciller alemana Angela Merkel calificó las ideas de “disparate y soluciones erradas”.
A pesar de su oposición pública, altos funcionarios señalaron que Berlín accedió a una acción rápida y esperan que haya un acuerdo en la reunión.
El plan más probable, según ellos, es usar el fondo de rescate de 440.000 millones de euros para comprar bonos italianos y españoles, lo que requeriría nuevas condiciones para ambos países. Otra idea es eliminar el estatus senior para el rescate español.
El jefe de gobierno español, Mariano Rajoy, volvió a instar al Banco Central Europeo o al fondo de rescate a comprar bonos españoles e italianos para reducir los costos de financiamiento, una idea respaldada por sus pares de Francia e Italia pero resistida por Merkel. La deuda española ha alcanzado costos récord en los últimos días.
“La cosa más importante hoy es ser capaces de financiarnos nosotros mismos en los mercados”, dijo Rajoy. “No podemos financiarnos a los precios actuales por mucho tiempo”.
Frente al Parlamento alemán, Merkel reconoció que la cumbre podría resultar confrontacional, ya que sus pares de Francia, España e Italia la presionan para que cambie su postura y apoya más intervención en los mercados y ayuda más directa a los bancos españoles.
“Espero una discusión controvertida”, afirmó. “Muchos ojos estarán sobre Alemania”.
Sin embargo, insistió en que primero debe haber más control sobre los bancos europeos y presupuestos nacionales antes de más solidaridad alemana.
Funcionarios galos dijeron que el presidente François Hollande seguirá presionando a Merkel para respaldar medidas que tranquilicen los mercados.
Hollande dijo que ambos líderes son “conscientes” de las medidas que deben preparar para la estabilidad financiera y la necesidad de profundizar la unión “económica y monetaria, y luego política”. “Necesitamos integración todo lo que sea necesario y solidaridad todo lo que sea posible”, dijo.
París apoya la inyección directa a bancos españoles y una garantía de depósitos común.
“Esta es una agenda que es muy importante para nosotros por la situación española, pero también para todo el sistema financiero europeo”, aseveró un funcionario galo.