Por Denise Tsang
Catorce años después de la entrega de la soberanía de Hong Kong, Cheung Kong Infrastructure Holdings (CKI) del magnate Li Ka-shing está haciendo inversiones en el antiguo gobernante de la ciudad y en las ex colonias británicas.
Nadando contra una corriente de capital extranjero hacia China, la empresa de infraestructura insignia del magnate ha cambiado de rumbo desde que se abrió en bolsa en 1996 como una firma puramente china.
Desde entonces se ha expandido desde una cartera de vías pagadas y generadoras en China y un negocio de cemento en Hong Kong a un imperio de agua, gas y electricidad en Australia, Nueva Zelandia, Canadá y Reino Unido. Y la tendencia está tomando impulso.
El director ejecutivo de CKI Kam Hing-lam dijo que el grupo prefería países que habían sido colonias británicas, así como al mismo Reino Unido. “Estamos familiarizados con los regímenes regulados del sistema británico”, explicó durante el anuncio de una oferta por la sanitaria Northumbrian Water la semana pasada.
Una vez terminado, el acuerdo con Northumbrian hará que el valor de la cartera de CKI en Reino Unido suba 62,5% a 65.000 millones de dólares hongkoneses (unos
US$ 8.325 millones).
Un servicio básico para una población de 4,5 millones del noreste y sureste de Inglaterra, Northumbrian Water tendrá un crecimiento predecible de los ingresos en los próximos cinco años ahora que el gobierno británico aprobó un alza en las tarifas.
Una fuente que ha estado involucrada en adquisiciones previas de CKI, dijo que la transacción ofrecía mayor previsibilidad en ingresos y retornos, y mínimo riesgo de cambios en las normas.
“Pero la compensación es que el retorno no será enorme”, aseguró. “Mirándolo desde una perspectiva más amplia, la estrategia de retorno estable de CKI mitiga los riesgos en otras partes del imperio Cheung Kong, que cual podría ser más agresivo en otras áreas de inversión”.
El analista de Citibank Pierre Lau estima que las grandes adquisiciones de CKI tales como el trato de Northumbrian y la firma de electricidad industrial de Reino Unido, UK Power Networks, podría producir un mayor retorno de un sólo dígito. CKI y compañías afiliadas pagaron US$ 5.100 millones por UK Power Networks en octubre pasado.
La cartera británica, que consiste principalmente de Power Networks, ayudó a CKI a casi doblar sus ganancias a 3.980 millones de dólares hongkoneses en los primeros seis meses de este año desde 2.020 millones de dólares hongkoneses un año atrás.
El director de investigación de servicios básicos de Samsung Securities, Gary Chiu Wingfai, estima que la cartera británica representa un 32% de la valuación total del grupo de 122.490 millones de doláres hongkoneses, mientras que su negocio tradicional Power Asset Holdings equivale al 41%. “CKI tiene paciencia para esperar el momento oportuno y el objetivo adecuado”, aseguró la fuente. “Cuando los precios del mercado son exigentes o los activos no son lo suficientemente atractivos, la compañía construye poder financiero”. En 2007, CKI cerró sólo una operación, pero sus fondos llegaron a un récord de 11.000 millones de dólares hongkoneses.
Lau de Citibank dijo que Europa proveerá oportunidades. Explicó que las compañías europeas buscan vender activos para refinanciarse, mientras los gobiernos recurrirán a la privatización para aliviar la deuda y el déficit financiero.