El Banco Central Europeo (BCE) suspendió la semana pasada sus compras de bonos gubernamentales de la eurozona mientras la crisis de deuda se toma un respiro, lo que le permite enfocarse en combatir el incremento de la inflación.
Los datos oficiales publicados ayer mostraron que la inflación anualizada de la eurozona alcanzó 2,4% en enero, la tasa más alta en más de dos años y por encima del objetivo del Banco Central Europeo de debajo, pero cerca de 2%.
Se espera que el BCE mantenga el jueves la tasa de interés sin cambio en 1%. Sin embargo, es probable que el alza de precios más alta a la esperada provoque advertencias del presidente del banco, Jean-Claude Trichet, de que el BCE actuará frente a cualquier signo que indique que la inflación se esté saliendo de control. La inflación de la zona euro en diciembre fue 2,2%.
El Banco Central Europeo señaló que su programa de compra de bonos gubernamentales -lanzado el año pasado como parte de los esfuerzos de la Unión Europea para estabilizar a la unidad monetaria, fue suspendido la semana pasada por primera vez desde octubre. Las compras mensuales habían alcanzado casi 3.000 millones de euros (US$ 4.107 millones) a fines del año pasado.
Posible reanudación de las compras
Trichet insiste en que la política monetaria del BCE está separada de las decisiones que se toman para superar la crisis. Sin embargo, sería improbable que los mercados financieros tomen en serio una amenaza de elevar las tasas de interés si el Banco Central Europeo está todavía interviniendo fuertemente en los mercados.
El BCE podría ser obligado a reanudar las compras durante las próximas semanas, pero Trichet ha hecho un fuerte lobby para que los nuevos mecanismos de rescate de la Unión Europea controlen el papel de apoyar a los mercados a través de la compra de bonos en un paquete exhaustivo que probablemente logre un acuerdo en marzo. Sólo están esperando que alguien venga a desatarlos de manos, comentó Carsten Brzeski de ING ubicada en Bruselas.
Los economistas no creen que se eleven las tasas de interés de la eurozona antes de que termine este año. Aunque Eurostat, la oficina de estadísticas de la Unión Europea, no dio detalles, la aceleración de la inflación de enero fue probablemente debido al alza de los precios del petróleo y de los alimentos.