El Banco Interamericano de
Desarrollo (BID) y el Fondo Monetario Internacional (FMI)
coincidieron hoy en que el impacto de la desaceleración económica de
EE.UU., que podría derivar en una recesión, será "diferenciado" en
Latinoamérica.
El presidente del BID, Luis Alberto Moreno, comentó durante una
comida en el Foro Económico Mundial (FEM), que se celebra hoy y
mañana en la ciudad turística de Cancún, que la composición de la
región es "heterogénea".
En este sentido, señaló que los países que resentirán más el
pobre desempeño económico de Estados Unidos serán los caribeños y
centroamericanos que dependen en mayor medida de las remesas
estadounidenses.
Recordó al respecto que el 70% de las remesas que recibe
Latinoamérica proviene de Estados Unidos, por lo que el efecto será
sobre todo importante "para los países pequeños".
Sin embargo, estimó que el impacto "no será severo" en la región,
porque el consumo ha venido creciendo "como nunca en la historia"
del continente, y la pobreza extrema se ha reducido.
Además, aseveró que la región goza de una de las mejores
situaciones económicas posibles, que se traduce en que algunos
países tengan balances fiscales con superávit.
Por último, Moreno afirmó que América Latina crecerá este año un
4,3% ó 4,5%, a diferencia del año pasado, cuando el Producto
Interior Bruto (PIB) de la región se expandió un 5,5%.
El director del Departamento de América Latina del FMI, el indio
Anoop Singh, opinó que el principal reto de los países
latinoamericanos será mantener la baja inflación que han logrado en
los últimos diez años, que se encuentra amenazada por aumentos en
los alimentos y las materias primas básicas ('commodities').
Singh advirtió que las condiciones financieras se siguen
"estrechando" y la aversión al riesgo de los inversionistas continúa
presente, pero se mostró confiado en que la región podrá enfrentar
la situación económica de EE.UU., porque, según él, la mayoría de
países reconoce la importancia de la estabilidad macroeconómica.
No obstante, el experto auguró que la duración de la
desaceleración estadounidense tomará "mucho tiempo", pues, a su
juicio, se trata de una corrección en el sector de la vivienda que
el país no experimentaba desde la posguerra.
El presidente de Citigroup para América Latina y México, Manuel
Medina Mora, quien también participó en la sesión, manifestó que
para el grupo financiero que representa la situación de EE.UU.
derivará pronto en una "recesión" que afectará a "todo el mundo
desarrollado", principalmente Europa y Japón.
Medina Mora apuntó, en ese contexto, que el impacto para América
Latina será "moderado", pero le restará "un punto completo de
crecimiento del PIB al año"