Las cuatro entidades que representan
a los agricultores de Argentina resolvieron hoy retomar las
protestas contra el Gobierno aunque sin bloquear carreteras ni
reanudar la huelga comercial que realizaron durante tres semanas y
que causó desabastecimiento de alimentos en todo el país.
Los dirigentes agropecuarios decidieron dar por finalizada la
tregua declarada hace un mes, que puso un paréntesis a las
protestas, para volver a manifestarse, pero "al costado de las
rutas", sin impedir el tránsito.
"Es el final de una etapa, pero el principio de otra forma de
movilización, manteniéndonos en estado de alerta, expresando la
bronca, el malestar y la ansiedad que hay entre la gente del campo,
pero con la voluntad de seguir discutiendo con el Gobierno", dijo en
rueda de prensa Eduardo Buzzi, titular de la Federación Agraria
Argentina (FAA).
Las mesas directivas de la Confederación Intercooperativa
Agropecuaria (Coninagro), la FAA, las Confederaciones Rurales
Argentinas (CRA) y la Sociedad Rural Argentina (SRA) acordaron
además "comercializar lo estrictamente necesario" de la producción
agropecuaria pues, a su entender, no hay condiciones "claras" en el
mercado.
De todos modos, Buzzi aseguró que los agricultores no quieren
desabastecer ni "confrontar con la sociedad".
Los productores agropecuarios realizaron durante tres semanas una
huelga comercial con cortes de carreteras en demanda de una política
agropecuaria integral y el levantamiento de un nuevo esquema de
impuestos móviles a las exportaciones de granos.
La medida fue suspendida el pasado 2 de abril, por el plazo de un
mes, para habilitar las negociaciones entre las entidades del campo
y el Gobierno, que estuvieron plagadas de tensión, marchas y
contramarchas.
El miércoles pasado, el Gobierno se comprometió a discutir la
semana próxima el tema de los impuestos a las exportaciones de soja,
trigo, girasol y maíz.
Además, prometió reabrir los registros para las exportaciones de
trigo y de carne de vacuno entre ayer y hoy algo que de momento no
se concretó.
Los dirigentes expresaron la necesidad de llegar al próximo
martes, cuando volverán a reunirse con el jefe de Gabinete, Alberto
Fernández, con un "cumplimiento efectivo" de lo que se les prometió.
Las entidades agrícolas reclaman además al Gobierno una política
integral de mediano y largo plazo para el sector, que no se limite
solo a carnes de vacuno, granos y leche, sino que abarque también la
producción porcina, las diversas economías regionales y una solución
para los cerca de 5.000 productores que aún adeudan unos 800
millones de pesos (250 millones de dólares) al estatal Banco Nación.
Con todo, ratificaron que el tema "prioritario" siguen siendo los
impuestos móviles a las exportaciones de granos, cuya implementación
fue el detonante de la protesta del campo.
El titular de CRA, Mario Llambías, sostuvo que por el conflicto
"hay una posición de no inversión" en el sector, con la "economía
parada en el interior del país" y graves perjuicios para el
transporte de cargas, los puertos y las industrias alimentarias.
Los dirigentes coincidieron en que se avanzó "muy poco" en las
discusiones abiertas con el Gobierno en este último mes, pero el
titular de Coninagro, Fernando Gioino, señaló que ahora "no hay
plazos para la negociación", sino que evaluarán "cómo evolucionan
los hechos día a día".
Se desconoce cuál será la reacción de los miles de productores
"auto-convocados" o independientes, no enrolados en ninguna entidad,
y que fueron los más combativos durante la huelga.
"Las entidades piden a todos los productores una actitud firme y
digna y de permanente movilización para defender lo que nos prometen
y no nos dan. Es como una vigilia", dijo Llambías en un mensaje a
los agricultores "independientes", a los que se les pide
manifestarse en asambleas y movilizarse con sus maquinarias, pero
sin bloquear las rutas.
Argentina es el primer exportador mundial de girasol, el segundo
de maíz, el tercero de soja y el cuarto de trigo, y ocupa también
puestos de relevancia en el comercio global de derivados (aceites y
harinas) de estos granos.