La economía rusa registró en noviembre su primera caída anual desde la crisis financiera, la primera señal clara de que el país está entrando en recesión y que provocó que el rublo retomara su tendencia a la baja. Por su parte, el gobierno autorizó apoyar a los bancos en problemas.
El Ministerio de Economía informó ayer que el Producto Interno Bruto (PIB) se contrajo 0,5% respecto de noviembre de 2013, la primera disminución desde octubre de 2009. En términos ajustados, la economía bajó 0,2% frente a octubre.
"Una brusca desaceleración en la manufactura tuvo el principal efecto negativo sobre la dinámica del PIB en noviembre", aseguró la cartera en un comunicado. La construcción, el comercio al por mayor y la agricultura mantuvieron su retroceso.
Un informe de Markit Economics y HSBC reveló ayer que el índice de gerentes de compra (PMI, su sigla en inglés) manufacturero disminuyó desde 51,7 puntos a 48,9 puntos en diciembre, su mínimo desde mayo. Una lectura por debajo de 50 puntos indica contracción.
"Los productores de bienes de consumo dejaron de beneficiarse del crecimiento de las ventas de retail", sostuvo en el reporte Alexander Morozov, economista jefe para Rusia, la Comunidad de Estados Independientes (CEI) y el Báltico de HSBC. "Esto sugiere que la sustitución de importaciones en este sector causada por la depreciación del rublo podría ser problemática y, en el mejor de los casos, tomará tiempo".
Dmitry Polevoy, economista jefe para Rusia y la CEI de ING Groep, afirmó a Bloomberg que "la dinámica del PIB probablemente va a empeorar más adelante, alimentando las ya pesimistas expectativas sobre las perspectivas de la divisa rusa".
El experto agregó que "una contribución positiva de las exportaciones netas no puede compensar una contracción de la demanda doméstica y una reducción más profunda en la inversión". Polevoy estima que tomará mucho tiempo reparar el daño al sistema bancario y la confianza de los consumidores.
"Todo está apuntando hacia una recesión y no es una gran sorpresa que ya estemos viendo cifras negativas ahora", expresó Anders Svendsen, analista de Nordea Bank.
El dato del PIB llevó a que la divisa local bajara más de 10%. La moneda cerró en 58,8 rublos por dólar, su mínimo desde el 19 de diciembre.
La divisa ha perdido casi 44% de su valor frente al dólar en lo que va del año, el segundo peor desempeño después de la grivna ucraniana entre 170 monedas monitoreadas por Bloomberg.
Las autoridades han intentado detener el derrumbe de la moneda recurriendo a las reservas extranjeras. Los fondos foráneos sufrieron en la semana previa a Navidad su mayor descenso en seis años y se ubicaron por debajo de los US$ 400 mil millones por primera vez desde comienzos de 2009.
Ayuda gubernamental
El Kremlin anunció nuevas medidas para apuntalar al sector bancario. El primer ministro Dmitry Medvedev informó que había firmado un decreto para proporcionar un total de 1 billón (millón de millones) de rublos (US$ 19.600 millones) a los bancos domésticos en problemas. El documento también fue autorizado por el presidente Vladimir Putin.
Según el viceprimer ministro Igor Shuvalov, las entidades y la cantidad de dinero que cada una de ellas recibirá estarían listas a mediados de enero. Según Shuvalov esta acción debería ayudar "al sector bancario a ser más estable en las nuevas circunstancias y protegerlo de nuevos shocks si es que ocurren", citó Tass.
Por su parte, el mandatario aprobó un decreto que establece que el Estado asegurará los ahorros de los individuos por hasta 1,4 millón (US$ 24.550) de rublos, lo que se compara con el umbral previo de 700 mil (US$ 12.275) rublos.
Putin también firmó la ley que provee hasta 10% del Fondo Nacional de Bienestar para recapitalizar a los bancos. Al 1 de diciembre, este fondo, que fue creado para cubrir los desembolsos a largo plazo para el gasto social, poseía US$ 80 mil millones.
Presupuesto de Ucrania
El Parlamento ucraniano aprobó con 233 de los 450 votos el presupuesto estatal para 2015 mientras el país busca liberar el siguiente tramo de un programa de ayuda de US$ 17 mil millones del Fondo Monetario Internacional.
"Este presupuesto, como otros presupuestos adoptados en este salón, está lejos de ser perfecto", declaró el primer ministro Arseniy Yatseniuk antes de la votación. "Por eso, el presupuesto debe ser revisado a más tardar el 15 de febrero. Lo modificaremos basándonos en el resultado de las conversaciones con las organizaciones financieras internacionales".
En un comunicado, la oficina del FMI en Kiev afirmó que el organismo se está moviendo "con toda prontitud" para continuar las discusiones con el gobierno sobre el programa de reformas para estabilizar la economía.
La misión del Fondo trabajará en Ucrania a partir del 8 de enero hasta antes de que se acabe el mes, detalló.