Nuevo presidente español desata polémica tras gastar US$ 17 mil en viaje para asistir a concierto de "The Killers"

A pocos más de un mes de asumir el cargo, el nuevo jefe del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, está envuelto en la mayor polémica de su administración.

El líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) ha generado indignación tras utilizar el avión presidencial el fin de semana para desplazarse a Castellón.

El problema es que tras una muy breve reunión con las autoridades locales, el mandatario se dirigió junto a su esposa al concierto del grupo estadounidense The Killers, cercano a esa localidad, donde ocupó un balcón VIP.

Lo muy acotado de sus encuentros oficiales despertó sospechas de que las reuniones fueron solo un pretexto y que el verdadero motivo del viaje fue asistir al concierto, por lo cual el uso del avión presidencial sería considerado como un derroche injustificado de fondos públicos.

El grupo parlamentario de Ciudadanos, a través de su diputada Marta Rivera de la Cruz, planteó el tema al Congreso.

Sánchez llegó el viernes a Castellón, donde realizó una visita protocolaria al ayuntamiento de 15 minutos y luego firmó el libro de honor. Más tarde y mantuvo un "encuentro informal" de unos 45 minutos con el presidente de la Generalitat, Ximo Puig.

La oposición cuestiona que esa agenda haya justificado el desplazamiento del avión presidencial.

El portavoz de Compromís en el Senado, Carles Mulet, pidió al gobierno que detalle el costo de su viaje y si fue cargado al erario público.

Por su parte, el ahora opositor Partido Popular estimó el costo de la visita en entre 10 mil y 15 mil euros (US$ 17.542) y parlamentarios de ese sector están pidiendo al presidente socialista que devuelva el monto.