Mayores oportunidades de conseguir un empleo y el persistente declive en los costos de los combustibles están haciendo que los estadounidenses se sientan más confiados en la recuperación de la economía.
El índice de confianza de los consumidores que elabora el centro de estudios privado Conference Board aumentó a 92,6 puntos en diciembre. Aunque fue menos de lo esperado, el indicador se mantuvo cerca del máximo de siete años alcanzado hace un par de meses.
Las percepciones de las condiciones económicas actuales, en tanto, avanzaron a su mayor nivel desde febrero de 2008. Los precios de la gasolina, que han caído cada día desde fines de septiembre, han dejado dinero extra en las billeteras de los estadounidenses justo antes de Navidad.
Más consumidores dijeron que están planeando comprar electrodomésticos y autos nuevos, reflejando los mayores avances en el empleo desde 1999 y los precios récord de las acciones, que mantuvieron a los hogares optimistas respecto de sus ingresos, mostró el informe.
"El crecimiento del empleo en 2014 ha sido bastante sólido y los menores precios del petróleo están entregando un viento de cola", dijo a Bloomberg Guy LeBas, estratega jefe de renta fija de Janney Montgomery Scott. "Tendremos otro desempeño estable de los consumidores en 2015".
Precio de viviendas
Un informe separado mostró que los precios de las viviendas están creciendo a un ritmo menor. El índice S&P/Case-Shiller del valor de las propiedades en 20 ciudades de EEUU subió 4,5% en octubre, frente al mismo mes del año anterior, informó ayer el grupo. Aunque menos que en el mes anterior, los expertos coiciden en que se trata de un ritmo favorable para la consolidación del sector en 2015.
Los precios están 25% por encima de los mínimos alcanzados tras la recesión. Ese rebote ayuda a recomponer las finanzas de los hogares, lo que está contribuyendo al aumento en la confianza de los consumidores y en el gasto, lo que a su vez está impulsando la expansión.
Greenspan pone en duda expectativas de una recuperación sólida
Justo cuando crecen las expectativas de un fuerte repunte de EEUU, el ex presidente de la Fed, Alan Greenspan, salió a bajar el tono. "A EEUU le está yendo mejor que a todo los demás, pero todavía no le está yendo tan bien", dijo el influyente economista en una entrevista con Bloomberg Television. "Todavía tenemos una economía bastante floja", agregó.
Greenspan afirmó que la economía no se recuperará totalmente hasta que las empresas estadounidenses inviertan más en activos productivos y el mercado inmobiliario rebote.
"Casi toda la debilidad en los últimos cuatro, cinco, seis años ha estado en inversiones longevas" en bienes de capital y bienes raíces, aseguró Greenspan.
"Hasta que esto repunte, no obtendremos el tipo de crecimiento vibrante que todos están esperando".
Greenspan, quien se retiró de la Fed en enero de 2006, dijo que espera que la expansión se ubique por debajo de una tasa de 3% anual en el cuarto trimestre de este año".