Inseguridad en el sur y alza de costos: los nudos de WOM y Movistar para ejecutar la Fibra Óptica Nacional

Las operadoras que están construyendo el proyecto de Fibra Óptica Nacional (FON), Movistar y WOM, han tenido problemas para avanzar con la red de 10 mil kilómetros de fibra que va desde Arica hasta Puerto Montt, lo que ha desencadenado una serie de conversaciones con la autoridad y los senadores en la Comisión de Transportes y Telecomunicaciones para dar cuenta del desarrollo. 

En el caso de la firma ligada al fondo Novator Partnes, hace poco obtuvo la autorización de la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel) para extender el plazo de la entrega del FON bajo el amparo de la cláusula de “hechos sobrevinientes”. La operadora alegó a la autoridad que hay “nudos” en el desarrollo de la red que “no pudieron ser tenidas en cuenta en el momento de la adjudicación” de la licitación, como los problemas de seguridad en la zona de la Araucanía, que se han agudizados en los últimos meses. 

El FON contempla seis macrozonas, cinco adjudicadas a WOM y una a Movistar por una inversión global de $86 mil millones por parte del Gobierno. El cronograma tenía previsto la primera entrega ejecutada por Novator para agosto de 2022, pero la plana ejecutiva dio cuenta en junio que no podría cumplir con el plazo.

El titular de la Subtel, Claudio Araya, reveló al Senado que después de una evaluación de antecedentes se decidió dar cuatro meses y medio más de tiempo y quedó fijada para diciembre la fecha definitiva. Sin embargo, por el alto volumen de las inversiones comprometidas los parlamentarios solicitaron a Subtel, WOM y Movistar dar cuenta de los avances de la red. Y es que los españoles se adjudicaron una de las macrozonas concursadas, además de contar con otro proyecto de fibra óptica en curso, cuya entrega será en 2024.

Los puntos críticos

“No ha sido fácil” , reveló a los senadores la vicepresidenta de Asuntos Corporativos y Sustentabilidad de WOM, Catalina Achermann durante su exposición a los parlamentarios, detallando “3 nudos” que impidieron a la operadora cumplir con el plazo.

El primero es la zona de conflicto de la Araucanía: “Hemos tenido técnicos asaltados, encañonados e incluso abandonados en medio de la carretera, lo que ha causado reticencia en la instalación”, explicó la ejecutiva que incluso contó que tuvo tres casos de ataques violentos contra los los funcionarios de WOM, donde en una ocasión un trabajador se refugió en una casa. Destacó los puntos de Quidico, Tirúa y Contulmo como los más conflictivos.

A esto se suma el relacionamiento con las comunidades mapuche a lo largo del país, desde Arica hasta Arauco. 

Y por último, las complejas conversaciones con Bienes Nacionales, donde se identificaron seis sitios fiscales que no cuentan con contratos fijos. “Necesitamos apoyo para lograr un acuerdo y de hecho aplaudimos la noticia de definir un coordinador digital por parte del Congreso, porque es muy difícil poder cumplir con los tiempos de despliegue”, contó la ejecutiva. 

Alzas en costos

Pese a que WOM no se refirió al aumento de los costos, el director de Asuntos Públicos de Movistar Chile, Fernando Saiz expresó que las telcos se están enfrentando a un fuerte gasto que no fue contemplado en el momento de adjudicación del concurso. 

“No es muy sexy de comentar, pero estos proyectos contemplan un subsidio que se entrega en peso chileno, no está indexado a UF o dólar, y con indicadores fijados en 2021, cuando el contexto económico mundial y nacional es otro. Al día de hoy, sin desvíos presupuestarios por mayores obras, simplemente por los incrementos macroeconómicos el proyecto es 20% más caro”, reveló el ejecutivo.

De hecho, Saiz contó que el alza será absorbida por Movistar, pero estima que para los próximos concursos se debe modificar el mecanismo y añadir una cláusula de indexación. Si el Gobierno no cambia futuros concursos: “simplemente serán inviables los proyectos”, remató.