Una etapa de cambios vive la emblemática maternidad de Clínica Alemana. En la fachada de su sede en el Edificio Manquehue Oriente, frente a las dependencias centrales de la institución en Vitacura, una nueva señalética guía el ingreso de los vehículos a la recién inaugurada urgencia gineco-obstétrica.
La iniciativa -concebida en los últimos años pero aplazada debido a la pandemia- finalmente habilitó un recinto especializado en recibir y atender a las pacientes que presenten alguna condición de riesgo. El plan incluyó la ampliación de las áreas de recepción y espera, el crecimiento de los box de atención, dotados con dispositivos de ultrasonido, y una sala equipada para dar atención inmediata a la madre y al recién nacido, a la cual se suman dependencias para las ecografías y otros exámenes. Todo, a cargo de un equipo de médicos, matronas y auxiliares de enfermería operativos 24/7.
Dr. Marcelo González, jefe del Departamento de Ginecología y Obstetricia de Clínica Alemana.
“El servicio de urgencia gineco-obstétrica responde a la necesidad dar atención de alto estándar a las pacientes con un evento urgente o una evolución más complicada de lo normal. Establecimos un espacio con acceso independiente y zona de acogida que permiten llegar directamente a la urgencia sin ingresar por el acceso principal, lo cual permite atenderlas inmediatamente desde que entran. Esto, incluyendo el parto de ser necesario, para después trasladar a la madre y al recién nacido hacia el área de neonatología”, señala el dr. Marcelo González, jefe del Departamento de Ginecología y Obstetricia de Clínica Alemana.
En la actualidad, la institución atiende unos 4 mil partos al año, a los que se suman unas 5 mil cirugías ginecológicas en el mismo lapso. En este escenario, “optimizar los espacios facilita el flujo y mejora la atención”, dice el titular de la unidad que tiene un equipo de 70 médicos.
Modelo de “alta segura”
La estrategia para la maternidad de Clínica Alemana está centrada en la implementación de un nuevo modelo de atención que tiene como eje “lograr una mayor estandarización de los cuidados médicos, desarrollando una práctica médica de mayor calidad y también mucha mayor eficiencia en el uso de los recursos”, señala el directivo.
Estos objetivos tienen su mayor expresión en el área de obstetricia. “Hoy sus 40 médicos hacen un cuerpo único con una atención institucional a todas nuestras pacientes”, indica. González subraya que este enfoque implica un cambio en la modalidad de atención obstétrica “que en el ámbito privado suele funcionar en una relación muy de uno a uno entre paciente y médico, que se puede ver afectada cuando éste último no puede atender el 100% de las veces por alguna razón”.
Por el contrario, enfatiza que el esquema implementado por Clínica Alemana permite que cada facultativo del área “cuente con el respaldo de los otros integrantes del cuerpo médico”.
Con la nueva organización, resalta, la maternidad “siempre cuenta con médicos que reciben a todos nuestras pacientes con una presencialidad 24/ 7 a partir de un sistema de turnos que permiten rotar las permanencias con las de áreas como preparto y pabellón”.
Además, la estandarización de los procedimientos y el incremento de las capacidades, están alineados al objetivo de aumentar las prestaciones en el área. “Desde el punto de vista clínico, queremos atender a la mayor cantidad de pacientes posible”, dice González, explicando que este año “tenemos como meta crecer entre 2% y 3% a nivel de obstetricia”.
Estos objetivos adquieren mayor relevancia en medio de los esfuerzos de la institución ante al complejo escenario que enfrenta el sector de la salud privada. “Clínica Alemana viene desarrollando una estrategia de eficiencia, maximizando el uso de su infraestructura -que por el momento no crecerá, ya que las inversiones están congeladas-, la transformación digital y un nuevo modelo de atención, transitando al diseño de soluciones integrales centradas en las necesidades de los pacientes desde un punto de vista sanitario para obtener los mejores resultados, y con un uso racional de los recursos que implica ahorros para el sistema de salud en su conjunto -pacientes, aseguradores y prestadores-, sin afectar la calidad”, señalan desde la institución.
Uno de los principales efectos tiene que ver con los tiempos de hospitalización.“Por la forma como ha funcionado históricamente el sistema, y las aseguradoras, se tiende a establecer plazos promedios de hospitalización administrativos, pero a nivel de la gestión médica lo que más importa son los hitos de recuperación clínica. Esto significa que si una paciente cumple todas las fases de una recuperación segura, puede continuar el proceso en su casa de la misma manera”, asevera el directivo.
González define este enfoque con el concepto de “alta segura”, cuya implementación es complementada por el monitoreo virtual que ofrecen los sistemas de telemedicina desarrollados por Clínica Alemana.
“Nuestras pacientes obstétricas tendrán el tiempo de hospitalización que clínicamente necesiten, independiente del número de días”, aclara el dr. González quien, al mismo tiempo, considera probable que “la suma de toda la gestión va a determinar que las permanencias serán menores a las históricas; las personas no quieren estar en un recinto de salud si no lo necesitan, y por ello las permanencias tenderán a ser más cortas. Eso implicará una mayor disponibilidad de capacidad de atención para otras personas que lo necesiten”.
“Desde el punto de vista de nuestra especialidad, el mejor lugar donde una madre con su hijo pueden estar es en su casa junto a su familia –sin dejar de mencionar que existen infecciones asociadas a la atención de salud-, además de favorecer un uso más eficiente de los recursos”, puntualiza.
El directivo explica que este modo de entender la gestión de salud también se extiende al campo de los procedimientos en ginecología: “hoy la medicina tiende a ser más ambulatoria, y eso lo estamos implementando a cabalidad en las cirugías”.
Los avances y planes en el área de medicina reproductiva
En momentos donde el perfil demográfico de Chile enfrenta niveles de natalidad cada vez menores, Clínica Alemana busca fortalecer su servicio de medicina reproductiva. “Hemos invertido en recursos humanos y técnicos para que sea una de las mejores unidades del país, y este trabajo ha logrado un alza sostenida”, destaca el dr. Marcelo González sobre el avance en esta área que cuenta con un equipo de 12 médicos de planta. Al respecto, indica que mientras hace cinco años la actividad en este campo ascendía anualmente a “unos 70 ciclos de atención para lograr embarazos, creamos un plan para llegar a niveles de 350 en 2024, pero en 2023 ya superamos los 500 ciclos”. Entre los planes, menciona el desarrollo de diagnóstico preimplantacional, que posibilita el estudio cromosómico de enfermedades en un embrión.
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