El grupo español Sacyr vendió hoy la
participación del 33,32% que tiene en la francesa Eiffage
a un grupo de inversores institucionales franceses por US$3.0461
millones, lo que supone que la
compañía no ha obtenido plusvalía alguna con esta operación.
La compañía española informó hoy a la Comisión Nacional del
Mercado de Valores (CNMV) de que la venta se ha realizado a US$98 por título, un precio por debajo de lo inicialmente acordado y al
mismo al que adquirió su participación.
Este acuerdo de venta, aceptado por la constructora gala, lleva
consigo los desestimientos de las acciones judiciales ejercitadas
entre las partes, incluida la denuncia interpuesta por Eiffage y
Eiffame que dio lugar a la imputación de Sacyr y de su presidente,
Luis del Rivero, por "difundir informaciones falsas y engañosas".
Los recursos obtenidos con esta desinversión se destinarán, en
primer lugar, a la cancelación de los diferentes préstamos que
financiaban la inversión en Eiffage que ascendían a US$2.718 millones, a 31 de diciembre.
Sacyr invertirá los US$328 millones restantes en la
reducción del endeudamiento corporativo de la compañía, que ve así
reforzada su posición financiera.
El grupo constructor español asegura que con esta venta "pone fin
a una situación de conflicto que se estaba prolongando en el tiempo
y permitirá a Sacyr dedicarse a otras iniciativas".
A pesar de que Sacyr no especifica quienes son los compradores,
el pasado 9 de abril informó de que había alcanzado un acuerdo para
vender su participación Eiffage a un grupo de inversores franceses
entre los que estaba el banco público CDC, dueño de un 8,5 por
ciento de la constructora gala; las aseguradoras AXA, CNP, AGF y
Groupama, así como el banco BNP Paribas.
No obstante, el director general de CDC, Augustin de Romanet,
desmintió hoy que se hubiera pactado la operación a un precio de US$99 por acción, aunque se mostró dispuesto a aumentar su
participación en la compañía a un precio inferior, lo que hace
suponer que finalmente se ha adherido a la compra.