La Ley de Etiquetado de Alimentos sigue evolucionando y la Navidad está dando prueba de ello. Ahora el foco está en cómo se comercializan distintos productos importados afectos a la norma, especialmente aquellos con motivos festivos, de cuyo envoltorio pueda interpretarse que se está haciendo publicidad a menores de 14 años.
A más de algún consumidor de Jumbo le llamó la atención este fin de semana una serie de chocolates navideños -principalmente viejos pascueros- importados desde Alemania, los que para cumplir a plenitud con la ley y no infringir el artículo sobre publicidad a menores, fueron envueltos en papel blanco, despejando cualquier duda que pueda haber en la interpretación de la norma.
De este modo, algunas góndolas se vistieron literalmente de blanco, donde algunos productos estaban en bolsas de papel y otros tenían un adhesivo blanco que ocultaba los llamativos colores del producto original.
¿Cómo un consumidor puede saber lo que hay al interior de los envases? Fácil. Cada producto trae un número, el que junto al precio detalla la figura y qué tipo de producto es. En su mayoría son viejos pascueros o reyes magos de chocolates en diferentes formatos (sin lactosa, sin azúcar, entre otros).
Jumbo al ser consultada por esta situación, aseguró que “desde la génesis de la Ley 20.606 Cencosud ha tenido una participación activa y colaborativa con las autoridades nacionales, garantizando el adecuado cumplimiento de la norma en nuestros locales”.
Además agregaron que han tenido un “especial cuidado en la supresión de elementos atractivos para menores de 14 años en alimentos ‘altos en’, monitoreando permanentemente nuestras tiendas y contribuyendo con el cambio positivo de la cultura de consumo de alimentos en nuestro país”.
Problema de importación
Pero en la industria comentan que este tipo de empaque se irá repitiendo en otras cadenas supermercadistas en los próximos días. Esto, porque sería la única forma de que estos productos importados pasen los filtros que se aplican en Aduanas.
La historia -relatan- comenzó en el reciente Halloween, cuando algunos importadores no habrían podido ingresar sus productos por dudas respecto de la aplicación de la normativa, especialmente respecto del atractivo de los envases para menores de 14 años.
Para evitar esos problemas, la forma de internar los productos sería a través de este tipo de envoltorios, dice una fuente, lo que es concordante con que otros productos similares, pero de fabricación local, lucen diseños más llamativos.
A la fecha el Ministerio de Salud ha realizado fiscalización en cerca de 1.000 establecimientos expendedores de alimentos, mientras que los alimentos son más de 3.000. De esos entre el 40% y 50% ha iniciado sumario.