Matthias Müller, el nuevo director ejecutivo de Volkswagen, se comprometió a presentar en octubre ante los reguladores una solución técnica que permita eliminar el software en los vehículos diésel implicados en el escándalo de las emisiones globales.
Dirigiéndose a los altos directivos en la sede de VW en Wolfsburg, Alemania, dijo que el grupo se enfrenta a la "mayor prueba de nuestra historia".
"Quiero demostrar al mundo que Volkswagen merece la confianza del público", dijo Müller, que el pasado viernes sustituyó a Martin Winterkorn como CEO del fabricante de automóviles más grande de Europa.
Los propietarios de automóviles VW serán informados en los próximos días si sus vehículos requieren una reforma. Una vez que los reguladores aprueben la revisión técnica, se invitará a los clientes a pedir una cita con un taller mecánico.
VW está elaborando un plan de acción para hacer frente a la crisis, y ha nombrado a Jones Day, un despacho de abogados de EEUU, para llevar a cabo una investigación sobre cómo ocurrió el engaño de emisiones. "Se trata de ganar de nuevo la confianza perdida", dijo el CEO.
Sostenibilidad
Los inversionistas están preocupados cuando VW enfrenta miles de millones de euros en multas, costos de retiro y demandas a raíz del escándalo, así como los daños a su propia marca que podrían socavar la demanda de sus vehículos.
Además, Volkswagen será eliminado de los índices de sostenibilidad Dow Jones debido a la manipulación de las pruebas de emisiones. La acción será retirada después del cierre de la sesión del 5 de octubre del DJSI World, DJSI Europe y todos los otros índices relacionados, según un comunicado.
Volkswagen también está incluido en los índices FTSE4Good de la Bolsa de Valores de Londres de las empresas socialmente responsables. Sin embargo, la pertenencia a estos puntos de referencia es revisada en junio y diciembre, con la participación de un comité asesor independiente, dijo a Bloomberg David Harris, director de FTSE Russell ESG, la unidad que proporciona los índices.
España sería responsable
Tres unidades españolas de VW y sus respectivos presidentes se enfrentan a una demanda penal que les acusa de estafar a los consumidores y a las autoridades fiscales y de dañar el medio ambiente.
Manos Limpias, un sindicato de trabajadores públicos, presentó la demanda privada ante la Audiencia Nacional el lunes. Mientras, el Estado español podría enfrentar una responsabilidad civil por no supervisar adecuadamente al fabricante de automóviles, de acuerdo con una copia de la demanda vista por Bloomberg News.
La denuncia apunta al presidente de Volkswagen Audi, James Morys Muir, al de Volkswagen Navarra, Ulbrich Thomas, y al de Seat, Francisco Javier García Sanz.