Mitsubishi vivió una nueva jornada negra. Sus acciones se desplomaron ayer más de 20%, rebajando su valor de mercado a 583 mil millones de yenes (US$ 5.293 millones), 150 mil millones menos que en la víspera.
La acción registró el retroceso máximo en más de una década luego de una caída de 15,16% que sufrió el miércoles, cuando el fabricante de automóviles reconoció haber manipulado datos de eficiencia energética en al menos 625 mil vehículos. Inversionistas temen incluso que pueda haber más unidades involucradas.
A las posibles compensaciones a clientes o multas del gobierno japonés se añade la considerable pérdida de valor de sus títulos. En dos días, la empresa ha perdido un tercio de su capitalización bursátil, unos US$ 2.494 millones.
“Es un caso extremadamente grave con efectos en la confianza de los consumidores”, declaró el portavoz del gobierno japonés, Yoshihide Suga.
Por su parte, el ministerio de Transportes de la nación visitó ayer las oficinas de desarrollo de Mitsubishi Motors para abrir una investigación y dio plazo hasta el 27 de abril para que la empresa presente un informe sobre el falseo de datos. También pidió a otras compañías del sector reportes sobre métodos utilizados en pruebas de eficiencia ante la sospecha de que existan más irregularidades.
Analistas consideran que lo ocurrido tendrá efectos profundos en la automotriz que dispone actualmente de menor liquidez y que ya fue rescatada financieramente en 2004, por otras empresas del conglomerado Mitsubishi. Pero además, contribuye a empeorar la reputación del sector, en entredicho tras el escándalo de manipulación de emisiones de Volkswagen.
VW logra acuerdo
Volkswagen llegó ayer a un acuerdo con autoridades de EEUU para resolver la demanda en su contra por la adulteración de las pruebas de emisión de gases. El pacto, con un costo de US$ 10 mil millones, fue presentado al juez de San Francisco e incluye la compra de 500 mil de los 600 mil vehículos afectados y compensación a los consumidores en ese país.
Una solución para el resto aún no ha sido alcanzada. El juez consideró que este es el primer paso y le dio al fabricante hasta el 21 de junio para afinar detalles.