Por Claudia Marín
De ser un proveedor de productos farmacéuticos genéricos para animales, a convertirse en un laboratorio especializado en el desarrollo de vacunas y medicamentos veterinarios fue la decisión que tomó Centrovet hace cinco años. Los impulsaron las ganas de atraer a las personas con los mejores talentos que estaban saliendo de las universidades en ese momento, para que trabajaran en las mejores instalaciones y se generara una instancia de confianza con los clientes, con todos los recursos disponibles para que el proyecto funcionara.
“Y los frutos de esta apuesta han sido súper extraordinarios”, afirma David Farcas, gerente general de Centrovet.
Crearon dos gerencias de I+D, una para vacunas y otra para fármacos, que son transversales a las tres especies en las que se enfoca la compañía, aves, porcinos y peces (la principal).
“En cinco o seis años pasamos a ser la empresa más importante en vacunas de peces en Chile. Hoy ya estamos pensando en cómo llevar estos productos a otros mercados, puntualmente a Canadá y Noruega que son países importantes en producción de peces”, agrega Farcas. Y una de las alternativas que barajan es instalar una planta de producción en Estados Unidos y otra en Noruega.
Compromiso con el cambio
El vuelco en el foco de la empresa ha requerido una inversión de US$ 12 millones en los últimos cinco años, de los cuales el 8% se destinó a I+D.
“Si se quiere ser un jugador de las ligas europeas, hay que estar dispuesto a comprometerse con altos recursos en un proyecto de largo plazo, de unos cinco o seis años. Se requirió mucha plata pero también mucha definición. Hoy para nosotros la I+D es súper relevante en lo que hacemos y en cómo enfrentamos los negocios”, dice Farcas.
Actualmente la empresa, que anota una facturación anual de US$ 60 millones y espera crecer un 20% este año, está trabajando en el desarrollo de una vacuna contra el caligus, un parásito externo de los salmones que constituye uno de los principales problemas en Noruega y que podría amenazar también a los productores chilenos en el futuro.
En aves, está desarrollando una nueva vacuna contra la salmonella, “más eficiente y más barata”, y que podría estar lista a finales del próximo año.
Y en porcinos, se espera que los primeros productos comerciales salgan al mercado en dos años.