Más de un millón de empleados por cuenta propia estadounidenses ya no siguen en actividades a casi cuatro años del inicio de la última recesión, debido a que la economía ha constreñido la actividad empresarial y la creación de empleo en las pequeñas empresas, informó Bloomberg.
La contracción de 18 meses de duración que se inició en diciembre de 2007 inicialmente implicó un aumento de los emprendedores, ya que el número de personas que trabajan para sí mismas creció a 16,3 millones en julio de 2008 desde 15,7 millones a fines de 2007, de acuerdo a cifras de la Oficina de Estadísticas Laborales. Desde entonces, el total ha caído en cerca de un 10% a 14,7 millones en julio, según los datos.
Los negocios que brindan empleos para individuos incluyendo al fundador “se han estado iniciando en menos números, con menos trabajadores y creciendo a un ritmo más lento que en el pasado”, según Robert Litan, uno de los vicepresidentes de la Kauffman Foundation, con sede en Kansas City, Missouri, que apoya la investigación en startups. “Consecuentemente, esos emprendedores están generando cada vez menos empleos para el mercado laboral en Estados Unidos”, agregó.
El número de nuevos negocios que dan empleo cayó un 24% a 505.473 en 2010 desde 667.341 en 2006, señaló Litan, quien fue uno de los autores de un informe publicado en julio sobre la creación de trabajo en las pequeñas empresas.
Lo anterior ha contribuido a un alto desempleo a medida que la recuperación de la economía es más lenta.
El presidente estadounidense, Barack Obama, ha dicho que las pequeñas compañías pueden ayudar a animar una expansión y se dirigirá en una sesión conjunta del Congreso el jueves para dar a conocer planes para promover un crecimiento en empleo.
El mandatario declaró ante los asistentes a una reciente ceremonia en la Casa Blanca que sus propuestas incluirán hacer “más fácil” para los emprendedores la contratación de personal.