Por Francisca Orellana
Un gran salto en materia de competitividad está dando nuevamente Centrovet, compañía farmacéutica veterinaria, que hace casi siete años vivió una transformación importante al pasar de ser proveedor de productos farmacéuticos a un laboratorio veterinario especializado en medicamentos y vacunas para salmones, aves, cerdos, entre otros. Hoy se está preparando para entrar a las grandes ligas: la Unión Europea, y especialmente a Escocia y Noruega, este último, uno de los mayores productores de salmones junto con Chile.
Bajo este nuevo escenario, la firma ligada a la familia Puchi y Farcas, está proyectando aumentar en 50% sus ventas en los próximos cinco años, y para ello, se están fortaleciendo internamente para aumentar la producción. David Farcas, gerente general de Centrovet, explica que en los próximos tres años invertirán entre US$ 12 y US$ 21 millones en nuevas tecnologías y planean subir en 20% la dotación de capital humano avanzado. Hoy el área de Investigación, Desarrollo e Innovación está compuesta por 48 personas, en la cual la gran mayoría cuenta con un magíster. Y se están ejecutando 20 proyectos en I+D+I. “Tenemos que hacer crecer nuestro equipo, principalmente, de I+D y el de calidad y producción, y así tener una oferta más interesante”, dice.
Por otro lado, están en la búsqueda de un socio local en Europa que les permita fabricar productos tanto en Chile como en ese continente. “Queremos generar sinergias y mayor capacidad de producción en productos que no hemos desarrollado. En Noruega hay patologías en salmones que no existen, como el caligus noruego (parásito). O trabajar en autovacunas (de tipo personalizadas o a la medida). Y comercializar productos que ya tenemos como las vacunas orales para salmones, que reemplazan a las inyectables, y extiende la protección contra ISA y SRS”, explica.
Primer centro
Este salto lo dan tras obtener en 2011 la autorización sanitaria de la Unión Europea para fabricar medicamentos y ser vendidos en ese continente, lo que se concretó hace pocas semanas al recibir la aprobación para exportar su primer producto farmacológico.
Además, ya están en las etapas finales para poder hacer lo propio en vacunas, particularmente para salmones, aves y cerdos. “Esto abre grandes oportunidades para la empresa con nuevos productos y mercados, ya que somos el único laboratorio al sur de EEUU autorizados para hacerlo”, acota el ejecutivo de la firma que este año proyecta ventas por US$ 65 millones. Agrega que gracias a la experiencia en la materia, tienen “ventajas competitivas y tecnologías que en Noruega no están disponibles”.
En medicamentos para cerdos y aves apuntarán a países de Europa del Este, como Estonia, Rusia, Lituania