Fallas gravísimas en diseño y ejecución, negligencia, engaño y obras mal hechas. Esas son algunas de las definiciones de un informe que delata las múltiples fallas del condominio Parque Monasterio II, emplazado en la zona de Los Trapenses en la comuna de Lo Barnechea, que debe utilizar "paraguas" cada vez que llueve.
La oficina de arquitectos de Gonzalo Krebs Godoy, realizó trabajos y diligencias periciales profesionales perofesionales durante cuatro meses y la principal conclusión de su informe (ver completo) es que "en relación a la calidad de la ejecución de la construcción, podemos concluir de manera fehaciente que existe un transversal mal hacer en el proyecto".
"Las fallas y muestras evidentes de problemas constructivos, son transversales y presentes en la gran mayoría de las partidas, no siendo ajustadas a norma y transformándose, a nuestro entender, en un caso reiterado de negligencia profesional y engaño", añade como conclusión contra la inmobiliaria MV y la Constructora GCI, ambas sociedades relacionadas con la empresa de servicios inmobiliarios P&G Larraín.
De este modo, según su informe apunta a que los primeros vendedores, la constructora, la inmobiliaria, el inspector técnico y otros relacionados, "deben responder, resolviendo y haciéndose cargo integro de los problemas, muchos de ellos gravísimos, que son de su responsabilidad, por mal diseño y ejecución".
"Las obras en techumbre se observan a simple vista, como mal ejecutadas, desordenadas y poco finas. Encuentros desprolijos, hojalatas abiertas, no traslapadas ni selladas. La gravedad de esta situación llevó al absurdo de requerir una gran carpa de tela, instalada en la azotea por parte de la inmobiliaria, para proteger a los departamentos de las últimas lluvias, de finales del mes de abril, ante su incapacidad, por más de un año, de resolver los mencionados problemas", dice el informe.
Muchos problemas
Como otro de los problemas, la oficina de Gonzalo Krebs reparó en que los departamentos nunca debieron venderse ni publicitarse como departamentos ampliables, "ya que legalmente no lo son".
"En los accesos a los edificios, se observan a simple vista, infinitas irregularidades en terminación y falta de pulido en los pasillos y circulaciones de accesos peatonales. Se constatan además gran cantidad de grietas, lo que acusa una mala ejecución de los radieres y la falta de dilatación entre las partes", dice el informe.
"A las grietas horizontales (por mala ejecución), laterales (por falta de terminación de zócalos), reparaciones con cambios notorios de tono, exceso de texturas y desniveles (que complican la circulación peatonal), zonas picadas en torno a la luminaria que esta con problemas, se suma la falta de pendiente general de las losas y peldaños, lo que genera acumulación de agua, con lo que el acceso se transforma en intransitable luego de una lluvia, o el simple riego del jardín", añade el documento.
Sobre los errores en la zona de la piscina y su perímetro, el informe asegura que "se encuentra completamente fisurado, ya que el terreno está cediendo y las losas de terrazas y pilares del quincho, se están distanciando e inclinando visiblemente".
"Informes de ya dos expertos en piscinas, que han analizado los problemas, han señalado que la estructura es irrecuperable y que la única forma de reparación, es la demolición y nueva ejecución de la misma", agrega.
"Junto a la mala construcción, la piscina fue ofrecida a los compradores, como semi olímpica, lo que fue incluso razón de compra, para varios de ellos. En vez de los 25 metros publicitados, esta fue ejecutada de aproximadamente la mitad de largo, aproximadamente 13 metros", concluye.