Porsche y la electromovilidad paulatina: “Hay un compromiso bien importante con los motores a combustión”

Sinónimo de lujo y sofisticación, el fabricante de autos de alta gama Porsche ha crecido este año en Chile menos que el resto de la industria: al cierre del tercer trimestre vendió 196 unidades, cifra que representa un 0,1% de las ventas totales de la industria automotriz, según el gremio ANAC.

La cifra también reveló una caída acumulada de 9,7% en las ventas y marca una diferencia con el resto del sector, que para este mismo período logró disminuir su retroceso en comercialización a un 6,1% en nueve meses.

“El resultado era esperado”, dijo al respecto el gerente general de Porsche Chile, Vicente Díaz, esgrimiendo circunstancias específicas del mes de septiembre. Pero la automotriz alemana mantienen sus proyecciones de cerrar con los mismos volúmenes de venta de 2023, “en línea con el rendimiento del mercado premium”, agregó.

Díaz señaló a DF que ellos esperan lograr un número de ventas de alrededor de 290 a 300 unidades, cifra que -a su juicio- va “bastante de la mano con lo que es el segmento premium dentro de Chile”.

“Si bien el contexto no es el más ideal para un crecimiento, seguimos manteniendo nuestra posición, seguimos renovando nuestra gama y con buena respuesta de parte de nuestros clientes. El tema de las alzas de precios y de la inflación trasciende un poco el tema de la industria premium. Nos deja tranquilo que el rendimiento que ha tenido la marca es positivo y que la recepción que hemos tenido de los nuevos productos también lo es. Para Porsche han sido buenos años 2023 y 2024”, sostuvo el gerente de la germana en Chile.

Electromovilidad y nuevos productos

En noviembre, tal como lo anunciaron en enero pasado, la automotriz lanzará su nuevo modelo Macan eléctrico, el cual -según el gerente de Porsche Chile- “es muy relevante porque, de alguna manera, marca y reafirma esta línea que está tomando Porsche de empujar por un lado la electromovilidad, pero también siendo fiel a la tradición de motores de combustión”.

Según explicó Díaz, este nuevo modelo va a coexistir con su hermano mayor a combustión -por lo menos- por un par de años, lo que demuestra que “la marca sigue sacando productos 100% eléctricos, pero también sigue desarrollando vehículos híbridos y vehículos a combustión”.

Esto coincide con el discurso de la marca de ir electrificando “pero de manera responsable”, buscando cubrir todos los segmentos de clientes que tienen.

Porsche tiene como objetivo para 2025 que alrededor del 50% de las ventas sean vehículos eléctricos y que esa cifra suba al 80% para 2030.

Sin embargo, en lo que va del año -con cifras a agosto de 2024- Porsche tan solo ha vendido cuatro autos eléctricos.

En esa línea, Díaz puntualizó que existe un compromiso “bien importante” por el lado de los motores de combustión. “Estos son vehículos que rara vez pasan al olvido, se desechan o van a otros mercados. Al revés, en la medida que van envejeciendo, van creciendo en valor y se empiezan a transformar en clásicos. Entonces, Porsche tiene un compromiso grande con todo este parque de vehículos a combustión”, puntualizó.

El ejecutivo afirmó que no están solamente enfocados en producir autos eléctricos “sin mirar para atrás”, dado que -según dijo el ejecutivo- no pueden olvidar el compromiso que tienen con los autos que ya están circulando en el parque.

Dicho esto, Díaz indicó que Porsche -a nivel global- ha invertido más de US$ 100 millones en el desarrollo y producción de combustibles sintéticos, conocidos como e-fuels, como parte de una estrategia integral que complementa su iniciativa de electrificación. Esta cifra incluye una inversión de US$ 75 millones en Highly Innovative Fuels (HIF), una empresa dedicada a construir plantas de e-fuels, entre las cuales se encuentra la planta Haru Oni -de hidrógeno verde- en Punta Arenas, Chile.

Díaz explicó que con esto ven una alternativa para poder entregar flexibilidad al camino hacia la electromovilidad.