Morandé Wine Group alerta por nuevo riesgo para las viñas derivado del coronavirus en China

Con presencia en 55 mercados, el continente asiático representa para las exportaciones de Morandé Wine Group -firma ligada al grupo Yarur- un 30%, de los cuales China se lleva el protagonismo. Por eso, en medio de la aparición del coronavirus, el grupo ha puesto especial atención en lo que ha estado pasando en ese país, donde ya tenía además una oficina comercial para seguir de cerca el desarrollo del mercado.

Javier Calvo, gerente comercial de MWG, da cuenta que el impacto económico del virus no sólo se está dando por los problemas logísticos o de transporte percibidos, sino también por los presentes en el sistema de pago de los envíos.

- ¿En qué mercados se compensa el efecto que se está viendo a raíz de lo que sucede en China?

- China es muy importante, pero el siguiente mercado es el Reino Unido, que tiene una posición muy sólida y una red de distribución bien madura y diversificada. Dado lo que está aconteciendo por el coronavirus, podemos estar tranquilos. En Inglaterra hay más posibilidades de recuperarnos que en el resto de la zona asiática, porque a pesar que el brote afecta principalmente a China, toda la economía del continente se ha resentido. Va a ser algo difícil de dimensionar, por eso creemos que las soluciones compensatorias no van a venir desde Asia.

- ¿Cuánto exportaban antes y después del brote a China?

- Entre el 2015 y 2019 como grupo duplicamos la venta en facturación, totalizando 274.000 mil cajas y US$ 5,8 millones a ese paí. Hasta el minuto no hemos tenido ninguna repercusión sobre cancelación de envíos, pero estamos muy atentos. Son los pedidos que están por salir los que pueden tener dificultades, ya sea por pago o porque no necesitan stock.

- ¿Qué está pasando en la cadena de pago?

- Uno de los riesgos que está tomando relevancia es el bancario. Los bancos volvieron el 10 de febrero después de que se reactivó todo, pero lo han hecho parcialmente. Incluso algunos aún siguen cerrados y los que ya están abiertos, tienen sus ventanas de transferencias internacionales cerradas. Estamos teniendo un frente de riesgo donde muchos clientes han tenido que pagar cosas antes de los despachos, o parte de las ventas cuando reciben los contenedores y esas transferencias no se pueden hacer.

- ¿Cómo funciona el proceso?

- En general las viñas trabajan con compañías que aseguran tus líneas de crédito. En China hay un montón de actores en este negocio y muchos de ellos no son asegurables porque llevan poco tiempo. En esos casos, generalmente la relación con el cliente opera a través de un prepago, que puede ser incluso el 100%, o con un 30% para comenzar la producción de la orden de despacho, y luego se realiza el postpago del 70% restante al recibir el contenedor en ese país.

Aquello requiere una serie de documentos originales para iniciar la nacionalización de la carga. Si estos papeles no se entregan, el contenedor queda en el puerto y la aduana no deja que el vino entre al mercado. Esa es la forma en que uno se asegura de que la mercadería siga siendo tuya a pesar de facturarla.

Pero lo que pasa hoy es que estamos teniendo dos tipos de problema: un cliente que tiene que pagar el 30% anticipado no lo puede hacer, al igual que otro que ya recibió su contenedor y que debe pagar el 70% post entrega. Esto, principalmente por el cierre de las ventanas internacionales.

- China es muy avanzado en el e-commerce. En el ámbito financiero, ¿pueden hacerse dichos trámites online o tienen que ser presencialmente?

- En general se requieren una serie de documentaciones que también le permiten a los operadores hacer transferencias internacionales. Mentiría si dijera que todos tienen la capacidad de hacerlo online. Lo más seguro es que efectivamente, estando cerradas las ventanas de transferencias internacionales físicas, se cierre el servicio online también.

Son tantas industrias las que están en esta situación y la cantidad de pagos que tendrán que ser procesados que, de todas maneras, el sistema se va a estresar en cualquier escenario.

No obstante, es algo que creemos que se va a regularizar en las próximas dos semanas. No creemos que tenga una repercusión más larga que esa.