General Motors (GM) Europa reducirá la
producción y la jornada laboral de sus empleados un 20% en
todas sus plantas el año que viene para hacer frente a la caída del
mercado y a sus dificultades financieras, marcadas por la necesidad
inminente de US$750 millones para
garantizar su liquidez.
Así lo anunció hoy el secretario general de UGT en la planta de
GM en Figueruelas (España) y único representante español en el
Comité reducido europeo, Pedro Bona, quien explicó que el
fabricante automovilístico se ha marcado como objetivo reducir un 10% los costos estructurales.
El recorte de la jornada de los trabajadores, que implicará
reducciones salariales, empezará a estudiarse la semana que viene en
la reunión que mantendrán en Alemania los 32 representantes
sindicales de las plantas europeas presentes en el denominado Foro
Europeo.
En el conjunto de las plantas europeas se prevé para 2009 un
volumen de producción de 1.385.000 vehículos, una cifra que ya
incluye la reducción de 20%.
En la planta de Figueruelas, donde acaba de aplicarse un expediente
de regulación de empleo (ERE) que afectará a 600 puestos de trabajo
durante un año, se prevé alcanzar este año una producción de 425.000
vehículos, lo que supone una reducción del 12,5% respecto
a 2007.
Además, con la nueva coyuntura, Figueruelas tiene ahora asignado
para el año que viene un volumen de producción de 361.000 unidades,
frente a las 415.000 que se habían calculado hace solamente unas
semanas.
Bona, quien ha participado el lunes y el martes en una reunión
del comité reducido europeo en Rüsselsheim (Alemania), ha afirmado
que todavía es pronto para saber cómo afectará al empleo el recorte
de la producción y no ha descartado que se pueda negociar un nuevo
ERE en Figueruelas, pero ha subrayado que el objetivo es que todos
los empleados mantengan el vínculo laboral con la empresa, al igual
que ha ocurrido en el último ajuste.
"La situación está muy mal y todo dependerá de la financiación
externa y de lo que los sindicatos puedan aportar" para salvar la
situación, ha argumentado Bona.
GM Europa, cuyos ingresos han caído un 16%, ha generado
unas pérdidas netas en el tercer trimestre del año de US$1.000 millones, frente a la baja de US$398 millones del mismo periodo de
2007, y en el último año ha visto cómo su cuota de mercado se ha
reducido del 9,5% al 8,9%.
La situación de la corporación mundial, que ha advertido de la
posibilidad de quiebra si no recibe ayudas en las próximas semanas,
es aún peor, con unas pérdidas de US$2.800 millones y una
pérdida de liquidez de US$6.900 millones en el tercer
trimestre, tal y como anunció la propia multinacional la semana
pasada.