Quiñenco recurrió hoy a la Corte Suprema para revocar en todas sus partes la resolución del Tribunal de Libre Competencia (TDLC) y de esta forma el tribunal declare que la compra de Terpel Chile por parte del holding del grupo Luksic se ajusta a la normativa de libre competencia.
Según indicó la empresa por medio de un comunicado, la resolución del TDLC "es ilegal, arbitraria y se funda en meras suspicacias sin prueba alguna, las que desconocen la presunción de buena fe y de inocencia de Quiñenco", la cual da a entender intenciones anticompetitivas coordinadas.
En ese sentido, Quiñenco agrega que "todos los expertos que intervinieron en la consulta ante el TDLC señalaron que la operación no afectaba la libre competencia en el mercado de los combustibles líquidos", y que además, "la Fiscalía Nacional Económica (FNE) aportó antecedentes al proceso de consulta ante el TDLC sin solicitar que la operación fuese declarada contraria a la libre competencia, sino que se limitó a pedir ciertas medidas de mitigación".
Ante esto, la compañía señaló "que dadas las eficiencias acreditadas y razonables provenientes de la fusión", la operación permitira que la entidad fusionada rivalice eficazmente con el líder del mercado, lo que era un objetivo buscado por el TDLC.
Por último, Quiñenco destaca que es primera vez que el TDLC declara contraria a la libre competencia una operación en que la entidad fusionada no obtendría una posición dominante en el mercado. "La fusión de Enex-Shell y Terpel Chile implicaría que Enex-Shell pasaría a tener una participación de mercado sustancialmente inferior –alrededor de 25% – a la del principal actor del mismo, como es Copec, que ostenta cerca del 60% del mercado", aclaró el grupo.
Cabe destacar que la empresa del Grupo Luksic firmó un acuerdo para adquirir los activos de Terpel en Chile (en manos de Copec) en unos US$ 320 millones. En mayo de 2011, ya había adquirido los activos de Shell en el país en más de US$ 630 millones.