Los ojos de las AFP están puestos en la llamada Comisión Bravo para una nueva reforma previsional, la comenzará hoy oficialmente a sesionar. Su importancia radica en que al igual que la Comisión Marcel, sentará las bases de los cambios que se introducirán en el sistema de pensiones local. Y entre sus 25 integrantes está Fabio Bertranou, especialista en mercado laboral y protección social de la oficina de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
-¿Cuál es la importancia que le da a esta comisión?
-Tiene una relevancia muy significativa, dado que demuestra el interés no sólo del gobierno, sino de los actores sociales, en tener un debate de políticas públicas informado, participativo, basado en criterios técnicos, pero a la vez con responsabilidad política y legitimidad social. Los sistemas de pensiones son complejos, y el desempeño de los mismos depende de numerosos factores demográficos, laborales, sociales e institucionales. Afectan a generaciones presentes y futuras; por ello son imprescindibles instancias donde participen los actores para dar sostenibilidad social a los cambios que necesariamente deben hacerse en el tiempo.
-¿Cuál es la perspectiva de la OIT respecto de la seguridad social?
-La perspectiva de la OIT está plasmada en el cuerpo de normas internacionales del trabajoque adoptan sus mismos constituyentes, es decir, los representantes de gobiernos y de organizaciones de empleadores y trabajadores. Es importante resaltar que no hay una receta única para configurar los sistemas de protección social, aunque sí hay acuerdos para promover ciertos principios y objetivos, como por ejemplo, la materialización del derecho humano a la seguridad social para todas las personas.
-¿Y los sistemas de pensiones?
-Estos mismos deben lograr, por un lado, evitar la pobreza en la vejez, pero a la vez brindar adecuada seguridad económica al trabajador cuando se retira de la fuerza de trabajo por jubilación o invalidez.
-¿Pero cree que es posible lograr ese objetivo?
-Está demás decir que no son objetivos sencillos de lograr para cualquier sociedad en el mundo porque, además, intervienen otros aspectos cruciales como el desempeño del mercado de trabajo en materia de empleos decentes, como también la capacidad del Estado para recaudar y financiar los componentes no contributivos.
-¿Está Chile bien encaminado?
-Chile hizo un enorme avance con la reforma de pensiones de 2008, especialmente al incorporar un importante componente de pensiones solidarias y al mismo tiempo otorgar un diseño integral al sistema vinculando sus distintos componentes contributivos y no contributivos. Como éstas son políticas de largo plazo no se puede de ninguna manera improvisar, por lo que la constitución de la comisión asesora es una manifestación de madurez política e institucional en tal sentido. No me cabe la menor duda que otros países de la región y del mundo observarán con atención este proceso.
"Se deben otorgar mejores pensiones"
El representante de la OIT en la Comisión Bravo, Fabio Bertranou, señaló que hoy "es claro que existe cierto diagnóstico compartido respecto a que el sistema debe otorgar mejores pensiones". No obstante, puntualiza que "hay diferentes visiones de los actores referidas a cómo y cuándo llegar a dicho objetivo, en un contexto donde al mismo tiempo hay otras urgentes demandas sociales, como por ejemplo en materia educativa". Es por esto que el académico considera que la creación de la Comisión Asesora para el Sistema de Pensiones, que será presidida por David Bravo, "podría contribuir a orientar sobre las opciones para que el sistema de pensiones chileno se coloque en un sendero sostenible de largo plazo desde el punto de vista social, incluyendo su sostenibilidad financiera".