SCA reaccionó con indignación luego que se filtrara el caso de colusión que reconoció CMPC con Kimberly Clark en el mercado de los pañales, en forma paralela -en gran parte de los años- al que mantuvieron ambas empresas.
Según la sueca, este antecedente es “otra manifestación del uso abusivo que la Fiscalía Nacional Económica (FNE) ha hecho de las solicitudes de confidencialidad de los antecedentes que componen el expediente de investigación”.
La ex Pisa recrimina no haber presentado el caso con todos los antecedentes desde un comienzo, lo que les habría permitido a las partes preparar mejor sus defensas en base a la totalidad de los hechos.
En un escrito que presentó ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC), dijo que la FNE no puede seleccionar algunos antecedentes o pasajes que benefician su caso y omitir o instar para que se mantengan bajo confidencialidad los que puedan “beneficiar la posición de alguna de las requeridas”.
SCA recalcó que no participó en ninguna colusión con Kimberly Clark.
Agregó que según la información divulgada, CMPC reconoció que su colusión con Kimberly Clark “afectó al negocio del tissue”, y dijo que al tenerse como confidenciales todos los antecedentes, “ha causado un perjuicio procesal relevante a esta parte, a quien se le había mantenido oculta hasta el día de hoy una parte sumamente relevante de la verdadera historia de los autos”.
El escrito se da en el marco del alegato contra una decisión del TDLC de autorizar que se levante la confidencialidad de algunos documentos solicitado por la FNE. SCA alega que levantar en este punto del proceso esos antecedentes, atenta contra el debido proceso porque ya se terminó la etapa de prueba.
CMPC envía carta
El gerente general de la papelera, Hernán Rodríguez, hizo llegar una carta a los trabajadores de la empresa explicando el caso, donde dijo que “no se trata de información nueva”.
“Quiero reiterar nuestro profundo rechazo a todo tipo de conductas o acciones contrarias a la normativa de libre competencia, como asimismo nuestra firme voluntad de compensar a los consumidores por los eventuales perjuicios cometidos” dijo, según publicó El Mostrador.
Defensa a Irarrázabal
El rol de la FNE sigue estando el foco de las críticas, especialmente del ambiente político. Los diputados Fuad Chahin y Marcelo Chávez pidieron que el fiscal Felipe Irarrázabal diera paso al costado y presente su renuncia, “en virtud de la gravedad de los hechos conocidos en torno a la colusión de pañales, pues estando en conocimiento de los hechos, la autoridad desechó esta arista”.
Cuestionaron el cambio legal recientemente aprobado por el Congreso, donde la tutela de la acción penal quedó radicada en la FNE, dejando a un lado al Ministerio Público. “El primer caso que vemos después de la promulgación de la ley, la Fiscalía tiene un pésimo debut. No investiga y desecha antecedentes claves”, dijo Chávez.
El ministro de Economía, Luis Felipe Céspedes, dijo que “quien puede remover al fiscal nacional económico es la Presidenta de la República a través de una solicitud del ministro de Economía con un informe favorable de la Corte Suprema”, consignó Cooperativa.
“Tomar algún tipo de postura respecto de esto, en la línea de lo que se ha planteado, me parece que no es responsable”, dijo.
Diputados UDI además citarán al fiscal a la Cámara.
El fiscal metropolitano sur, Raúl Guzmán, quien intentó investigar el caso tissue, hizo ver que era “grave” que no pudieran acceder a estos datos y que se podía configurar algún tipo de obstrucción a la investigación que intentó realizar.
Los resguardos de la FNE para mantener documentos: filtraciones se pagan con cárcel
La filtración de la autodenuncia de CMPC ante la Fiscalía Nacional Económica abrió la interrogante en la industria cómo se resguardan datos sensibles en este tipo de investigaciones.
Desde sanciones administrativas hasta penales arriesgan los funcionarios y asesores de la FNE en caso de ser sorprendidos filtrando documentos que tengan el carácter de confidencial.
Cercanos al organismo aseguran que este tipo de documentos sensibles están resguardados en salas especiales para contener la información confidencial o reservada proveniente de delaciones o de allanamientos.
Estas instalaciones cuentan con puertas de hierro y estrictos mecanismos de control como biometría que permiten accesos controlados del personal.
Es más, el organismo encabezado por Felipe Irarrázabal optimizó los sistemas de seguridad cuando se trasladó a sus nuevas oficinas en calle Huérfanos a mediados de 2015. Esto, porque mantener el secreto es clave a la hora del éxito de una investigación.
Sanciones
La ley que fija normas para la defensa de libre competencia obliga a los funcionarios y personas que presten servicios a la FNE a "guardar reserva sobre toda información, dato o antecedente de que puedan imponerse con motivo u ocasión del ejercicio de sus labores".
Si, por ejemplo, tras un sumario se determinara un responsable interno por la filtración de un documento, la ley contempla sanciones.
Un empleado público que revele información que no deba ser publicada se expone a penas de suspensión del empleo en sus grados mínimo a medio (un año y un día a dos años) y a una multa que va entre seis a veinte UTM (más de $ 920 mil).
Si la revelación de información resultara en un "grave daño para la causa pública", la pena se eleva hasta la reclusión mayor en cualquiera de sus grados, que parten en 5 años y un día hasta los 20 años, además de una multa de hasta 30 UTM ($ 1.380.000 aproximadamente).
Según Carla Bordoli, de Bordoli Doren López Abogados, estas penas tienen el objetivo de disuadir las posibles filtraciones de cualquier persona que tenga contacto con una indagatoria, así como aquellos que presten declaraciones o insumos de forma tal de asegurar el éxito de la investigación.
¿Qué sucedería si la filtración viniera desde fuera de la FNE? Claudio Sepúlveda, socio de ZBS Abogados, explica que en el caso de empresas acogidas a delación compensada, estas se encuentran obligadas a mantener reserva hasta que la FNE formule un requerimiento o archive la investigación. En caso contrario, perderían el beneficio.
Todo esto, sin contar que podría haber otros actores desde donde se pudiera haber filtrado.
Continuidad de presidente de filial de LarrainVial está en duda
La nueva arista del caso que envuelve a CMPC podría traer efectos en LarrainVial. Esto, porque la continuidad de Gonzalo Eguiguren como presidente de la filial que administra fondos generales está en duda tras que se conociera el caso.
Eguiguren llegó al cargo en LarrainVial Asset Management en 2014 y, según fuentes conocedoras del proceso, se estaría evaluando si seguirá en el cargo o no, algo que debería quedar definido entre hoy o mañana. Aunque no está comprobada su participación en los hechos, dada la sensibilidad del cargo, podría alejarse de el.
El actual directivo fue mencionado en el documento donde CMPC se delató en marzo de 2015 de haberse coludido con Kimberly Clark en el mercado de pañales, entre 2002 y 2009. Según el relato de la papelera, el cartel habría comenzado en 2002 en un restaurante del ex Hotel Carrera, donde Eguiguren y el entonces gerente general de CMPC Tissue en Chile, Eduardo Serrano, se habrían reunido.
"En ese almuerzo se habría acordado mantener conversaciones para competir sin destruir los niveles de precios", dice el escrito que publicó La Tercera.
Aunque la Fiscalía Nacional Económica hizo ver indirectamente que mantenía abierta una investigación por el caso, su grado de avance no es claro. De hecho, Eguiguren habría comentado a su círculo laboral el martes, una vez conocido el caso, que solo se enteró de esta situación con la publicación de la prensa y nunca ha sido contactado, informado ni menos notificado, ni por Kimberly Clark, ni la FNE, de ninguna investigación sobre estos hechos.
Moreno se refiere al caso
El ex canciller y próximo timonel de la CPC, Alfredo Moreno, señaló ayer que "la colusión atenta contra las bases mismas de lo que es el libre mercado y las empresas".
"Las empresas, para poder ser útiles para los consumidores y para ser perdurables en el tiempo, tienen que tener una justificación social y esa es la libre competencia y esto atenta contra la libre competencia, así que creo que en eso no van a haber dos opiniones".
Al ser consultado por el rol de los gremios frente a estas conductas, aseguró que ellos tienen códigos de ética y "esos son los que han funcionado, van a funcionar, y tienen que funcionar (...) Pero las sanciones que esperaría la población tienen que ver con las sanciones efectivas penales que corresponden a otros entes".
El líder de la Abif, Segismundo Schulin-Zeuthen, enfatizó que la colusión es inaceptable. Dijo que la mayoría de las empresas tiene códigos de ética, pero "no basta hoy" con tenerlos sino que "hay que hacerlos realmente cumplir".
En la CChC, Sergio Torretti, comentó que las sanciones corresponden a la rama a la cual pertenece esta industria que, en este caso, es la Sofofa.
sernac Descarta sumar NUEVO CASO
El Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) descartó incluir la arista de los pañales en la mesa que integran CMPC junto a organizaciones de consumidores para buscar compensaciones por la colusión del tissue.
"El trabajo que estamos desarrollando actualmente con CMPC respecto del papel tissue es por un caso distinto: son otros productos, es otro período de tiempo, una de las eventuales empresas involucradas es distinta", dijo Ernesto Muñoz, director del Sernac.
En la Organización de Consumidores y Usuarios (Odecu) esperan que el daño económico de la colusión de pañales también pueda ser incluida en la actual mesa, para facilitar el proceso.
Desde CMPC reafirmaron su disposición a compensar a los consumidores por el perjuicio ocasionado por este nuevo caso, pero todavía no tienen definido el camino que tomarán esas compensaciones. El tema será abordado en la próxima reunión de la mesa negociadora el lunes posterior a Navidad.
¿Quién es kimberly Clark?
Kimberly Clark es una empresa estadounidense fundada por John Kimberly, Charles Clark, Frank Shattuck y Havilah Babcock en 1872, y el primer producto que fabricó fue el papel de periódico, realizado con hilos de algodón y lino reciclado.
La compañía hoy cuenta con productos para la salud, higiene y cuidado personal y sus marcas más reconocidas son: Huggies, Pull-Ups, Plenitud, Poise, Kotex, Kleenex, Scott, Kimberly-Clark Professional, Kimberly-Clark Health Care, entre otras.
La empresa, según detalla en su página web, cuenta con un equipo de trabajo de más de 53.000 empleados alrededor del mundo, con centros de producción en 37 países y puntos de venta en más de 150 países.
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